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El Málaga ya tiene a su segundo fichaje del verano. Se trata del centrocampista Luismi Sánchez, que se encontraba libre en el mercado tras terminar contrato con el Real Oviedo el pasado 1 de julio, equipo en el que jugó durante las últimas tres temporadas ... en Segunda División. El club blanquiazul hizo oficial esta contratación, cerrada mediante un acuerdo por dos temporadas, este viernes a través de un comunicado. El jugador pasará reconocimiento médico el próximo lunes, cuando también está previsto que se presente ante los medios de comunicación.
A sus 32 años, el gaditano ha aceptado la propuesta del conjunto malaguista, aunque también estaba muy interesado en su fichaje el Zaragoza. Un esfuerzo extra del Málaga en la negociación y la perspectiva de ser una pieza clave en la plantilla que dirige el entrenador Sergio Pellicer han sido dos factores importantes para que la balanza se inclinase en dirección a La Rosaleda. Además, el destino malagueño supone para Luismi volver a estar cerca de su familia (es natural del municipio Puerto Serrano).
Con este movimiento, el Málaga consigue tachar otro de sus objetivos prioritarios en el mercado de fichajes, que era apuntalar el centro del campo con un jugador curtido y que ofrezca garantías cara al regreso a Segunda. Luismi tiene una gran experiencia en la división de plata y es un perfecto conocedor de la categoría. Es un clásico centrocampista posicional, un '6', que abarca campo, da solidez defensiva a su equipo en el medio, es poderoso en el juego aéreo y puede ayudar en la salida del balón. También puede jugar como defensa central si el guion lo exigiese. Por su parte, el Málaga ha presentado el fichaje como «jerarquía y consistencia para la medular».
Criado en las categorías inferiores del Sevilla, debutó con el cuadro hispalense en Primera ante el Valencia CF en 2014. Tras finalizar su formación en el filial sevillista (en Segunda B), el jugador desembarcó en el fútbol profesional de manera definitiva en las filas del Valladolid en la 16-17. Desde entonces, ha vestido las camisetas del Gimnàstic de Tarragona, Elche y Real Oviedo (en dos etapas). Luismi ha disputado un total de 251 partidos como profesional, 153 de ellos en Segunda División. Los últimos fueron precisamente en la fase de ascenso a Primera con el Oviedo, donde se quedó a las puertas contra el Espanyol. Él fue titular en los cuatro encuentros del 'play off'.
Otra de las peculiaridades de Luismi es que juega con un casco protector. Lo usa desde 2012, cuando sufrió un fuerte golpe con un partido del filial del Sevilla contra el Jaén en Segunda B. Se fracturó dos huesos del cráneo, fue ingresado en la UCI y operado de urgencia. Desde entonces compite con esta protección, que con los años le ha servido también para ganarse el apodo de 'guerrero' por su aspecto. Así es el segundo refuerzo del Málaga este mercado de fichajes después del central Álex Pastor. Y aunque cuenta con una importante base del año pasado, a la que quiere darle continuidar, al equipo blanquiazul todavía le quedan varios fichajes por hacer para subir el nivel de la plantilla y el siguiente gran objetivo es la delantera.
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