Ayer, a menos de dos semanas para el comienzo de la competición, quedó definida la ruta de partidos para la temporada 2020-2021, que dará inicio el fin de semana del 13 de septiembre. El Málaga, que llegará a esa fecha, según se prevé, con serias dificultades para definir un once titular sólido y engrasado, se estrenará contra el Tenerife a domicilio. Un rival que amenaza con preparar un equipo de garantías al ser uno de los pocos que goza de liquidez después de traspasar a uno de sus puntales, Milla, por cinco millones. Aunque también tendrá la presión del reloj, algo que euilibra fuerzas. No será un inicio fácil para casi nadie.
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En la segunda jornada, el equipo malaguista, que pidió jugar fuera de casa las primeras fechas del campeonato para poder contar con algo más de tiempo cara a completar de manera satisfactoria la resiembra del césped de La Rosaleda –que estuvo a pleno rendimiento hasta principios de agosto por la fase de ascenso a Segunda–, viajará a Castellón para medirse a un club ilusionado con la vuelta al fútbol profesional tras una década en depresión. El Málaga volverá trece años después (la última vez, en 2007, venció por 2-3) a Castalia, un estadio mítico por llenarse aun estando en el pozo más profundo como fue bajar a Tercera. Eso fue hace apenas unos años (precisamente el filial del Málaga fue a disputar allí un 'play-off' de ascenso a Segunda B). Aunque esta vez no contará con las miles de voces que le suelen dar sonido, porque está previsto que vuelva el público a las gradas por el momento.
No será hasta la tercera jornada de Liga, en el fin de semana del 27 de septiembre, cuando LaRosaleda reabra para acoger un partido del Málaga como local. Será en la visita del Alcorcón, precisamente el último rival de la temporada pasada. Ese fue el encuentro en el que los malaguistas pudieron respirar en paz y 'celebrar' la salvación. Aún quedará un partido más antes de que cierre el mercado de fichajes (el 5 de octubre), fecha clave para que el Málaga consiga una foto fija de la plantilla definitiva para competir al menos durante la primera vuelta. Será con una visita al Rayo Vallecano, un serio aspirante al ascenso la campaña pasada y que en esta seguirá siéndolo con el entrenador revelación de la temporada pasada en Segunda, el ex del Mirandés Andoni Iraola.
Cuatro escenarios diferentes para arrancar la temporada y de los que será importante no salir excesivamente debilitados porque desde este punto y hasta la jornada 13.ª el recorrido es todo cuesta arriba. A pesar de jugar también con algunos equipos de menor talla, se enfrentará a los tres recién descendidos de Primera (Mallorca, Espanyol y Leganés) en el primer cuarto de calendario. Y si fuerte es el inicio, más duro se antoja el final. En los últimos seis partidos, que siempre se antojan decisivos, también se cruzará con los descendidos (que son los poyectos más fuertes a nivel económico y de recursos de jugadores). El partido final, que puede ser definitivo, será en La Rosaleda ante el Castellón, previsto para el fin de semana del 30 de mayo. Entre otras fechas de interés, el exmalaguista Antonio Hidalgo, ahora entrenador del Sabadell, podría volver a La Rosaleda a principios de marzo, justo antes de la visita a Las Gaunas, el mítico estadio del Logroñés.
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