La permanencia para el Málaga, a cuatro puntos en una pelea que se reduce a cinco equipos

El empate del Málaga contra el Burgos generó una profunda decepción tanto en el club como en el entorno blanquiazul. La frustración por perder una nueva oportunidad propicia para comenzar la remontada necesaria para salir del descenso lo impregnó todo y el nuevo punto conseguido se valoró como una derrota. Y lo cierto es que esa sensación está justificada después de presenciar un nuevo capítulo donde el equipo sigue sin reaccionar ante la amenaza de descenso y las oportunidades de corregir el hundimiento se van acabando (le quedan 18 partidos).

Y la clasificación sirve poco de consuelo porque, aunque gracias al triste empate del sábado el equipo malaguista alcanza 21 puntos y recorta uno de distancia con la decimoctava plaza, por otro lado se ha abierto una preocupante brecha con la decimoséptima posición, donde se encuentra el Zaragoza con 29 puntos. Es decir, una diferencia de ocho puntos que invita al pesimismo y reduce la lucha por la permanencia a una 'miniliga' de cinco equipos donde el Málaga no es el mejor posicionado porque por delante están a cuatro puntos el Racing de Santander y la Ponferradina.

Por otra parte, lo milagroso es que a pesar de lograr sólo dos victorias en más de tres meses (los últimos 13 partidos, desde el 16 de octubre ante el Lugo), el Málaga esté todavía a cuatro puntos de la permanencia. Su balance es calamitoso: cuatro victorias, 9 empates y 11 derrotas. Por suerte, hay rivales directos que también van a una velocidad parecida a la de los malaguistas. Racing y Ponferradina, ambos con 25 puntos, y el colista, el Ibiza, perdieron sus partidos de esta jornada frente a equipos que se encuentran entre las quinielas para el ascenso.

El cuadro cántabro, dirigido por el exmalaguista José Alberto y que es el que actualmente marca la permanencia con 25 puntos, cayó de forma contundente ante el Alavés por 3-0, viendo cortado así su amago de mejoría de la semana anterior. El equipo de El Bierzo, que también tiene 25 puntos, perdió en casa contra el Eibar por 0-1. Y por último, el Ibiza, muy descolgado ya, perdió contra el Granada por 2-0. Pero además también perdió el Lugo. Y precisamente la derrota del conjunto gallego es la que permite que el Málaga suba una posición y pase a ser antepenúltimo, pero esto trajo consigo también una mala noticia.

Porque el equipo gallego perdió contra el Villarreal B, que estaba en caída libre y que tenía papeletas de caer al barro. Ocurrió lo contrario y por el momento sale a flote para tomar aire como el Tenerife, que también hizo los deberes y ganó en Cartagena para alcanzar los 30 puntos. Son reacciones esperadas en busca de salvarse de la quema y reflejan que lo que no es normal es lo que ocurre con los cinco últimos, protagonistas de un rendimiento paupérrimo. Con esto se demuestra que seguir empatando no lleva al Málaga muy lejos.

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