Llega la hora de la verdad para el Málaga

Los rivales están ofreciendo oportunidades, una tras otra, al Málaga para que se aleje lo antes posible de la zona baja, pero hasta ahora las estaba dejando pasar, ahondando más en su dinámica negativa y mostrándose incapaz de ganar más partidos. Sus mejores momentos los ha ofrecido con cuentagotas en los últimos partidos, lo que ha agudizado la crisis de resultados. Y ahora llega su mejor ocasión para cambiar el rumbo, para reaccionar de una forma definitiva cuando quedan doce encuentros para el cierre del campeonato. Juega en casa, ante una afición entregada, y lo hace después de una 'larga' semana en la que el entrenador y los jugadores han podido reflexionar y trabajar con comodidad. El rival es de los fuertes, el Cartagena (en La Rosaleda, a partir de las 21.00 horas), pero en las circunstancias actuales este 'detalle' pasa a un segundo plano.

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Apenas importa el once que comience el partido, siempre que ofrezca equilibrio y sea capaz de contrarrestar las virtudes del rival, sin olvidarse de la portería contraria. Será una 'final' en la que el Málaga está obligado a ofrecer su mejor cara para sumar un nuevo triunfo, pues el último llegó en el primer encuentro del año, en Alcorcón, en otro mal partido de los blanquiazules. Y el anterior a este en competición liguera hay que buscarlo en noviembre, en el campo de Martiricos contra Las Palmas (desde entonces el equipo ha tomado parte en nada menos que once partidos).

Partido diferente

Todo hace indicar, según los comentarios que se trasladan desde el interior del vestuario, que el partido de hoy será diferente. La concienciación de los futbolistas es previsible que sea mayor, lo que puede instalarse en el terreno de juego. El público seguirá siendo el gran apoyo del equipo, pero como decía el propio técnico, todo tiene un límite. «Nosotros debemos alimentarlo», decía González en clara referencia a que los aficionados colaborarán al máximo, pero también tienen que ver en el campo la entrega de los futbolistas en un planteamiento correcto. La entrada a La Rosaleda será como la de otros días, si bien el club ha puesto en marcha algunas iniciativas que a última hora pueden permitir que mejore el número de asistentes este lunes por la noche.

El equipo blanquiazul mantiene bajas importantes, pero sólo están ausentes tres futbolistas. Por una parte, Juande sigue con nuevos problemas musculares y se perderán los próximos encuentros (es una baja fundamental en este momento) y, por otro lado, se mantienen lejos del equipo Luis Muñoz y Genaro, intervenidos ambos de la rodilla (de cruzado y de menisco, respectivamente). De ahí que el entrenador dispone de muchas opciones para formar un equipo competitivo en base al rendimiento que han ofrecido los futbolistas en los últimos encuentros. Parece claro que habrá cambios en relación al fiasco contra el 'Sanse', equipo al que ha reactivado el cuadro de Martiricos con su clara derrota (después ha ganado en Oviedo).

En cuanto al rival, el Cartagena dispone de una plantilla fuerte y con importantes aspiraciones, aunque la racha del equipo murciano no sea ahora tan positiva. Su veterano delantero Rubén Castro, sin duda, es su principal referencia y la gran amenaza para el endeble, al menos en los últimos partidos, sistema defensivo malaguista.