Frenar la caída y resurgir a toda costa, único plan del Málaga

La falta de gol y hasta de oportunidades están lastrando al equipo en los últimos encuentros. Los rivales encuentran demasiadas facilidades ante un Málaga que se vuelve frágil muy rápido, sobre todo cuando recibe algún gol. Para combatir este problema, el cuerpo técnico trabaja a destajo en busca de unas soluciones que sigue sin encontrar. Mel va a recurrir ya, incluso, a una psicóloga, Patricia Ramírez, para explorar otros campos que puedan desatascar al equipo mentalmente, algo habitual cuando las dinámicas son negativas y no llegan los resultados positivos.

Esta jornada completa el primer tercio del campeonato, una parte fundamental ya de la competición, lo que obliga un poco más al Málaga a reaccionar para comenzar una escalada que le permita, al menos, salir del peligro en poco tiempo y después asentarse en unas posiciones tranquilas a la espera de la fase final de la Liga. Tiene sombres en su plantilla para no sufrir, pero desde el club deberán arreglar la descompensación que existe, con ausencias importantes en determinadas posiciones.

Rotaciones en once

En el plano puramente deportivo, aunque en este momento sea menos relevante por la trascendencia sólo de los puntos, hay algunas variaciones. Entran en la convocatoria Luis Muñoz y Chavarría, mientras que se caen de la misma por un virus estomacal Fran Sol y Bustinza (también se reincorpora a la lista Genaro). Y la alineación va a cambiar de una forma sustancial. El técnico dice que perdería su credibilidad si no hace cambios tras una derrota, pero es que, además, el domingo habrá partido de nuevo (en La Rosaleda, contra el Sporting) y será necesario hacer algunas rotaciones para que los futbolistas estén más frescos físicamente.

El once, de esta forma, puede variar en casi todas sus líneas, dándole descanso Mel a algunos futbolistas que han acumulado ya muchos minutos. Será el momento, asimismo, de las oportunidades de ciertos jugadores que pueden ofrecer otras posibilidades al juego. Y el sistema también podría retocarlo el entrenador, quizás con el objetivo de reforzar algo más del centro del campo para que el Málaga no sea tan vulnerable en determinados momentos de los partidos, como se puede observar cada semana.

Las claves, como siempre, estarán en ser capaces de aguantar bien defensivamente a un rival fuerte en su campo, intentando evitar errores individuales que muchas veces son forzados por los desajustes, y luego buscar la forma de controlar el centro del campo para disponer de opciones para profundizar y, sobre todo, disfrutar de ocasiones de gol. Ganar el partido, de esta forma, se presenta como una urgencia para que el Málaga alcance la calma y pueda acometer sin sobresaltos las decisiones que necesita adoptar de una forma inmediata.

Enfrente tendrá un equipo en plena forma, que ha encontrado la manera de asentarse en la categoría desde el comienzo. Y en él militan algunos viejos conocidos de los malaguistas, como el lateral calero, que quizás podría haber continuado, o el delantero Sadiku, Alcalá, Kiko Olivas y el portero Aarón.