Llegar a las dos jornadas finales dependiendo de sí mismo, primer objetivo del Málaga

Las cuentas en el Málaga a estas alturas pasan por un objetivo claro, el de llegar a las dos jornadas finales dependiendo de sí mismo para salvarse, privilegio del que viene gozando toda la temporada, ya que en ningún momento se ha visto en zona de descenso. Para ello hay que salir ileso de la próxima jornada, que depara una visita complicada al Tenerife (domingo, 21.00). El cuadro de La Rosaleda sólo caería a la zona caliente perdiendo y si la Real Sociedad B derrota el viernes (21.00) al Almería.

Si no se da esta temida combinación, el Málaga entraría en otro escenario. Sus dos citas finales son más propicias, ante rivales que no se juegan nada, el Burgos (en Martiricos el sábado 21, a las 21.00) y el Lugo (visita al Anxo Carro el domingo 29, a las 18.30. Aunque la permanencia de este (a siete puntos del decimonoveno) aún no sea matemática, se prevé que sí lo sea ya entonces.

La Real Sociedad B se ha convertido por méritos propios y, sobre todo, por deméritos del Málaga, en el gran rival en la pelea por la salvación, con el Amorebieta algo más descolgado. El cuadro que entrena Xabi Alonso llegó a encontrarse a diez puntos de las plazas de permanencia entrada la segunda vuelta del torneo (entre las jornadas vigésima quinta y vigésima séptima, en concreto), y ahora está a sólo dos del objetivo. Ha vuelto a la vida, con las virtudes y defectos clásicos de un filial: irregularidad, calidad técnica, inexperiencia, menor presión en la búsqueda de objetivos... A diferencia de dos históricos como el Málaga y el Sporting el descenso para este equipo no sería un fracaso. Casi un debutante en la categoría (jugó dos campañas antes en ella, pero allá por los años sesenta), el periplo en este curso ha servido como un fenomenal bagaje para sus jugadores cara a su posible salto a la élite,. Descender no tendría las mismas consecuencias incluso económicas que para la entidad gijonesa y malagueña, que ya van por tres técnicos este curso.

A la Real Sociedad B, en la clásica tendencia de menos a más de los filiales que aterrizan en Segunda, pagado el plato de los errores de juventud de las primeras jornadas, le puede faltar campeonato para asegurarse la permanencia, y también ha tenido dosis de fortuna. El sábado certificó su victoria en Fuenlabrada (la tercera consecutiva) en el minuto 96 y jugando en superioridad numérica, en el mismo minuto en el que culminó su remontada ante el Sporting (2-1) el 7 de marzo, y en el 91 rescató un punto en Ibiza (2-2), en el mismo minuto que Borja Bastón malogró un penalti en su triunfo en Oviedo. Incluso, hace una semana se impuso contra pronóstico por 1-2 en Valladolid con tantos en propia puerta del cuadro pucelano.

Salvando ese último puerto de montaña en Tenerife, el calendario del Málaga no parece ni mucho menos el más complicado entre los cuatro equipos que pelean por eludir las dos plazas de descenso por adjudicar (las otras son para el Fuenlabrada y el Alcorcón). Sin ir más lejos, el Sporting ha de recibir al Girona y a Las Palmas, que pelean por jugar la fase de ascenso (se espera que el cuadro canario siga inmerso en la lucha cara a la jornada final). La Real B lo tendrá harto difícil ante el Almería el viernes, muy cerca de certificar su ascenso directo. Y, aunque el Amorebieta se mide estas dos próximas jornadas al Huesca y el Cartagena, sin grandes alicientes deportivos a estas alturas, lo cierto es que parte con un desfase de cinco puntos y podría tener un partido trampa en la última jornada, cuando recibe a la Ponferradina, que de momento está a un punto de la zona de 'play-off' y podría seguir viva en la pelea.

Frente a un calendario que no juega demasiado en su contra, el Málaga no parte nada bien situado en la cuestión del 'goal average', que puede ser determinante, ya que es lo que resuelve hipotéticos empates a puntos. Pierde ante todos sus rivales directos, salvo frente al Amorebieta, con el que lo empata, pero a efectos prácticos es como si lo tuviera en contra, porque a la hora de comparar la diferencia de goles general, el siguiente criterio de desempate, sigue habiendo diferencia en contra (es de '-21' en los blanquiazules, por el '-16' del cuadro vizcaíno).

En la lucha final por la permanencia en Segunda, hay muchos marcadores que tendrán influencia en encuentros en los que no juegan equipos implicados directamente. Por ejemplo, para el Málaga resulta más beneficioso que el Tenerife gane este lunes (21.00) en Montilivi al Girona, lo que lo dejaría bien asentado en la zona de 'play-off'. Una derrota lo colocaría con sólo tres puntos de colchón sobre el séptimo, con más necesidad si cabe de sumar en el duelo ante los pupilos de Guede.

Tampoco se puede pasar por alto la situación del Mirandés y el Lugo ahora con seis y siete puntos de margen, respectivamente, sobre la zona de descenso (con nueve puntos en litigio aún), algo que concierne también al Málaga, que acabará jugando en el Anxo Carro, o el hecho antes referido de que Las Palmas y Ponferradina sigan sumando para llegar a sus duelos finales ante Sporting y Amorebieta, respectivamente, con opciones de ir a la fase de ascenso. Finalmente, el Almería no podrá celebrar el ascenso el viernes, aunque gane (necesita que el sábado pierda el Valladolid).