Secciones
Servicios
Destacamos
El acuerdo para la salida de N'Diaye ya era total y se ha confirmado esta mañana. El futbolista viajó ayer a Arabia Saudí para firmar el contrato con su nuevo club (Al-Shabab) y el anuncio ya es oficial: jugará allí ... tres temporadas. Pero los problemas del Málaga no han desaparecido ni mucho menos. Tras esta operación, que también afecta al Villarreal, LaLiga ha vuelto a ser muy drástica con el club malaguista y le aprieta al máximo, hasta el punto de que no le dejará inscribir a más jugadores si no rebaja de forma considerable su elevada masa salarial.
N'Diaye se decantó por la propuesta de Arabia Saudí a finales de la semana pasada cuando con anterioridad parecía todo definido para que recalara en el Getafe en calidad de cedido. Fue entonces cuando se cruzó una astronómica oferta de Arabia Saudí y al futbolista le surgieron dudas. Como adelantó SUR desde el primer momento, el senegalés lo tuvo claro, no así su entorno. Finalmente, tras varios días para cerrar su fichaje, el Al-Shabab ha anunciado su contratación por tres temporadas. El Málaga se ve liberado de la parte de la ficha que debía pagar (en torno a millón y medio) y también de la opción de compra obligatoria de seis millones al final de esta campaña. Mientras tanto, el Getafe, a la vista del cambio de postura del jugador, optó por incorporar el jueves a Timor, de Las Palmas.
Como explicó el miércoles este periódico, la semana pasada el Málaga tuvo más manga ancha para la convocatoria frente a Las Palmas de forma excepcional. LaLiga valoró el esfuerzo del club para hacer frente a su complicada situación económica, con los traspasos de Ontiveros y Santos (al Villarreal y al Copenhague, respectivamente), y por esa razón facilitó que fueran dados de alta Juanpi, Keko y Rolón (también Mikel, con una ficha más baja). Pero nada más. En esa información también se explicaba que desprenderse de N'Diaye no era suficiente para proceder a más inscripciones. Y así sucedió ayer.
Tanto la semana anterior como ayer mismo el caballo de batalla entre el Málaga y LaLiga se ha centrado en la elección de los futbolistas a inscribir. En La Rosaleda se ha peleado para que fueran dados de alta los dos fichajes anunciados hasta el momento, Okazaki y José Rodríguez (el tercero, Simón Moreno, firmó ayer su contrato en las oficinas de La Rosaleda y está a la espera de que Al-Thani ponga la rúbrica). Sin embargo, en la capital de España obligaron la semana pasada a que entre los elegidos estuvieran Juanpi, Keko y Rolón. Con esa medida fuerzan al club a desprenderse de ellos. Si no lo consigue, no habrá más altas. La patronal de clubes argumenta que deben tener prioridad aquellos futbolistas profesionales con vínculo contractual con la entidad durante la temporada pasada (con más antigüedad) y por ello tampoco da vía libre a Iván y Mula, que, al dejar de ser sub-23, ya deben tener obligatoriamente ficha profesional.
Es decir, LaLiga le exige al Málaga más salidas y, de paso, deja entrever con la prohibición de inscribir a más jugadores que el límite salarial lo tenía superado la semana pasada. De lo contrario, con la salida de N'Diaye sí habría sido factible que hubiera entrado en la lista alguno de los fichajes. Asimismo, la decisión deja a la entidad de Martiricos en una tesitura muy complicada porque va a tener que afanarse en sacar a los Juanpi, Keko y Rolón (más Luis Hernández o acceder a un hipotético traspaso de Diego González) en menos de 72 horas y en un mercado complicado. La debilidad del club es sobradamente conocida, así que no va a ser sencilla cualquier negociación. La marcha de Mikel o Tighadouini, como ha sucedido con el guardameta turco Cenk, tendría escasa repercusión cara al tope asignado.
Conviene recordar que entre Juanpi, Keko y Rolón perciben en torno a tres millones en emolumentos y que además el club arrastra las 'amortizaciones' correspondientes del extremo (1,25 millones) y del centrocampista argentino (800.000 euros). Es decir, independientemente de la salida de N'Diaye, cuanto más pueda ahorrarse de aquí al cierre del mercado (el lunes a las 12 de la noche), más margen tendrá para fichar jugadores. Y teniendo en cuenta que en ese grupo ya estarían fijos Okazaki, José Rodríguez, Iván y Mula. Luego están los casos de Simón Moreno, muy barato, y del futbolista argelino que quiere imponer Al-Thani, Benkhemassa, con un salario más respetable.
Y aunque no lo parezca, el Málaga tiene mañana partido. Visita al Girona, uno de los tres descendidos a Primera (tras un nefasto final de temporada), en una cita que apenas ha tenido repercusión durante toda la semana. Hoy saldrá al escenario Víctor Sánchez del Amo, habrá lista de convocados, la expedición se desplazará a tierras catalanas... pero el interés del malaguismo se centra en la planificación. El interés y, al mismo tiempo, la preocupación. La cita en Montilivi (19.00 horas, Gol y Movistar LaLiga) ha quedado totalmente eclipsada por los escasos avances en la configuración del equipo.
La plantilla del Málaga ha proseguido toda la semana con su habitual rutina de entrenamientos, pero la actualidad deportiva del equipo y la actividad de los pupilos de Víctor se mantienen en un segundo plano. Durante los dos últimos meses y medio la incertidumbre en torno a la confección de la plantilla ha dejado en un plano muy secundario todo el trabajo de los futbolistas. La atención la han acaparado Ontiveros, Santos, N'Diaye... La situación del club es demasiado complicada y LaLiga se ha puesto firme: o rebaja considerablemente su masa salarial o no podrá inscribir a más jugadores.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.