El 'caso Al-Thani' va para largo: puede necesitar hasta otra comisión rogatoria para llegar a juicio

La situación actual puede dividirse en dos frentes: por una parte el trabajo que sigue realizando de una forma constante el Juzgado de Instrucción número 14 de la Ciudad de la Justicia, con María de los Ángeles Ruiz al frente, y por otra parte la actitud de los Al-Thani, que nuevamente están sin abogados que los defiendan tras la nueva renuncia hace ya algunos meses de la letrada Vanessa Fernández Lledó por diferencias entre las dos partes. De ahí que esto último sea el primer escollo a la hora de que el procedimiento siga su curso normal, pues en el caso de que no disponga de defensa sería necesario el nombramiento de un abogado de oficio (antes estuvo a punto de producirse, pero llegó la reacción en el último instante).

Analizando la situación por partes y siempre teniendo en consideración a los expertos consultados por este periódico, el primer paso consistirá en el cierre precisamente de la instrucción. ¿Qué debe ocurrir para ello? No será un trámite fácil ni rápido, pues el procedimiento es laborioso. La Fiscalía ha anunciado que no solicitará más pruebas cuando reciba las dos que solicitó y que, por su parte, en ese momento quedaría todo solucionado (se desconoce cuál es este plazo). Pero ahí no acabaría el asunto, ni mucho menos.

A continuación llegaría la parte fundamental, el turno de la jueza, cuya labor no será nada fácil en ese momento. Deberá analizar la situación del proceso y, si lo considera, redactar un auto formal en el que especifique los indicios de criminalidad de los Al-Thani para que el proceso pase a un juzgado de lo penal o directamente a la Audiencia Provincial, dependiendo de los delitos que pueda imputarles a la espera del juicio. Tendrá que relatar las pruebas pertinentes para sostener las acusaciones que considere oportunas. También puede optar por el archivo en el caso de que no encuentre los indicios suficientes.

Pero aquí, una vez que se pronuncie de forma definitiva la magistrada y las partes presenten sus escritos de acusación, comienzan los 'problemas'. Esta resolución de la jueza y el escrito de apertura del juicio oral, es recurrible. Pero todos ellos, asimismo, tendrán que ser traducidos al árabe, lo que supone una primera trabaja más importante de lo que aparece, y notificados a los investigados en el lugar en el que se encuentren o mediante el proceso que haya sido consensuado. Entendiendo que, una vez llegado a este punto, ya deberían disponer de abogado o se nombraría uno de oficio, tendrán que recibir esta documentación y, si no es posible hacerlo, la jueza tendría que solicitar nuevamente una comisión rogatoria a las autoridades de Catar para que el proceso pueda seguir adelante (en la anterior ocasión el proceso se demoró debido a que las autoridades cataríes no daban respuesta a la petición).

¿Cuánto tiempo se puede necesitar para todo ello, para que el 'caso Al-Thani' cambie de juzgado? Es completamente imprevisible en este momento debido a que dependerá de diversos factores, si bien el más destacado será el que afecta directamente al jeque y a sus hijos, que deberán disponer de un letrado que los defienda y tendrán obligatoriamente que ser notificados para que sean conscientes del auto de imputación y del resto de resoluciones que se vayan produciendo. ¿Un año más? Las fuentes consultados aseguran que será así, como mínimo.

Los obstáculos no paran de cruzarse en el camino del 'caso Al-Thani', que está funcionando con rapidez en la habitual burocracia judicial, pero su complejidad y la falta de colaboración en algunos casos de los investigados demora y complica de forma reiterada su avance hacia una salida, que supondría la liberación del Málaga de una intervención que ahora le impide crecen de una forma definitiva.