Pozo, el talento malagueño que creció en el Madrid y el Manchester City

La historia de José Ángel Pozo La Rosa (Fuengirola, 1996) es la de un talento precoz que pronto estuvo en el radar de las mejores canteras. Su juego, imaginativo, elástico y muy estético, ya llamaba la atención desde muy joven, cuando dio sus primeros pasos en el club de su ciudad, el Fuengirola Los Boliches. Los técnicos le vaticinaban un futuro asegurado en el fútbol profesional por su calidad, y eso le abrió las puertas de las mejores canteras. El Madrid no tardó en reclutarle desde muy joven, con apenas 12 años.

Esa salida temprana de su casa y sin haber pasado siquiera por la cantera del Málaga, hizo que su crecimiento futbolístico pasase de puntillas en su tierra. Este próximo domingo será rival del conjunto blanquiazul en La Rosaleda, una ocasión de lujo para repasar su particular trayectoria. En una semana especial para Pozo, tras reaparecer en la jornada pasada con un gol después de superar una pequeña lesión, el fuengiroleño atiende a este periódico para reflexionar sobre su historia, desconocida para algunos en Málaga. Otros recordarán que fue uno de los goleadores en el 4-0 que el Málaga recibió en la primera vuelta en Vallecas. Será se segunda vez en La Rosaleda.

«Empecé a jugar en el Fuengirola y el Sevilla me echó el ojo e iba con ellos a algunos torneos amistosos de alevines. Con el Sevilla fui también al torneo de Brunete, y fue donde me vio el Madrid. Desde los 12 años hasta los 16 estuve en la cantera del Madrid hasta que firmé en el Mánchester City, donde estuve hasta los 19. Con esa edad firmé con el Almería en Segunda y estuve allí tres temporada. Y ahora es mi tercera en el Rayo. Llegué aquí hace dos, cuando estaba en Primera», resume Pozo, quien fue un pionero de su generación.

Aceptó la propuesta de un Mánchester City que empezaba a construir un ambicioso proyecto de cantera. «Sí, ya estaba allí Denis Suárez cuando llegué, pero luego es verdad que fueron viviendo muchos más. Angeliño (ahora en el Liepzig), Pablo Maffeo (Huesca), Manu García (Sporting), Aleix García (Eibar), Brahim (Milan)... Muchos compañeros», hace memoria Pozo, quien fue igual de valiente años después para dejar atrás el mastodóntico club inglés y apostar por crecer fuera de la cantera de un gran club. Y eso que había tenido un debut de ensueño de celeste, marcando en su primer partido con la primera plantilla, en ese tiempo dirigida por Manuel Pellegrini, que había estado en el Málaga el año anterior.

Decidió depositar sus esperanza en una nueva etapa en el Almería, en Segunda, después de haber debutado incluso con el primer equipo 'citizen' y haber jugado varios partidos en la Premier. De rojiblanco maduró a pasos agigantados y con sólo 20 años fue el jugador franquicia de la entidad. Todo esto antes de que desembarcase en la ciudad el poderío económico de Turki Al-Sheikh. Antes de la llegada de los millones al club almeriense dio el salto a Primera con el Rayo, en la campaña 18-19. Su progresión pedía a gritos una oportunidad en la máxima categoría y cumplió las expectativas. De hecho, fue uno de los jugadores mejor valorados de esta temporada en el conjunto madrileño a pesar de no poder evitar el descenso. Un rendimiento que propició su vuelta a las categorías inferiores de la selección española con la sub-21.

Ahora es una figura más importante aún en el proyecto del Rayo, donde buscan ascender cuanto antes para no seguir ensanchando su distancia con Primera. «Estamos peleando por estar en 'play off'. Los tres de arriba están muy fuertes y consiguen muchos puntos, pero vamos a intentar dar guerra hasta el final para aspirar al ascenso. Nosotros, al final, lo que tenemos que hacer es no descolgarnos demasiado. En Segunda, que es muy larga, pueden cambiar mucho las cosas. Hay que estar cerca para tener una oportunidad», focaliza Pozo, que está cumpliendo su quinta temporada en Segunda. Parece todo un veterano, pero aún es muy joven.

«Es que llevo desde los 19 años cuando firmé en el Almería. Pero dentro de poco voy a hacer 25 años, y tengo que seguir aprendiendo y seguir creciendo, porque me quedan muchas cosas por aprender y mejorar», reflexiona el malagueño, quien reconoce que jugar en La Rosaleda es una cita singular para él. «Es un partido especial, sin duda, porque es ir a mi tierra. Cuando podía ir gente al estadio podía ver a todos mis amigos y familiares. Aunque nunca haya pertenecido al Málaga, jugar allí claro que es especial», reitera con la misma rotundidad que asegura que «nunca» hubo opciones de fichar por el conjunto blanquiazul.

«Nunca se ha dado, pero también digo que nunca se sabe qué puede pasar en un futuro. La posibilidad siempre estará ahí», apunta antes de demostrar que es un gran conocedor del contacto malaguista. «Lo sigo, porque además tengo a un muy buen amigo trabajando en el club, Francisco Capote, que es secretario técnico. Yo veo bien al equipo. Es muy joven y demuestra muchas ganas. Necesita ahora un poco de tiempo, pero me gusta porque juegan muy alegres. Necesitan que haya paciencia, porque creo que están haciendo las cosas bien con el poco presupuesto que tienen y todas las cosas que han pasado en lo institucional», valora.

Y elige a Ramón como uno de los jugadores que más le ha sorprendido del Málaga este año. «No lo conocía y me ha sorprendido. Creo que juega muy bien. Nunca le había visto», confiesa antes de poner el broche pensando en la cita del domingo. «Aunque venimos de empatar, hicimos un buen partido y creo que quizás merecimos más. Hay mucha confianza y no vamos a otra cosa que no sea la victoria», afirma.

• Temas
• Manuel Pellegrini
• Manchester City
• Málaga
• Fuengirola
• fútbol
• Segunda División