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Con 30 años y en su primera campaña como primer entrenador, Javier Medina sigue disfrutando del buen año del Antequera en Primera RFEF. Llega a ... La Rosaleda con una premisa clara: «En el fútbol tienes que dominar el balón, los espacios, pero también las emociones». Y lo hace en su cuerto derbi contra el Málaga dos duelos en pretemporada y la derrota en casa en la primera vuelta (0-2).
«En la pretemporada ninguno de los dos equipos teníamos dinámica negativa. Estábamos ilusionados por una nueva campaña. Luego nos vimos en la Liga con una buena posición en la tabla, sintiéndonos muy a gusto, pero ellos vinieron con esa tensión de que no podían perder y eligieron muy bien sus momentos para cuando nos equivocáramos y aprovecharlo».
Pero ante este partido el escenario ha cambiado. «Ahora nosotros no tenemos un objetivo clasificatorio. Nos llena de ilusión. Es un honor jugar allí, un orgullo. Y ellos sí tienen esa presión de que están en un 'play-off' y no tienen una dinámica positiva, por lo que quien la controle mejor (la presión), será el que gane».
Medina es consciente de jugar un partido en el qu «vamos a representar a un equipo de la provincia en La Rosaleda, algo que se merecen estos jugadores, y con una posición en la tabla que se han ganado. Por ello, espero que lo disfruten, aprovechen, compitan y luego se recuerde».
Respcto a su rival, el Málaga, dijo que «es tensión pura por la situación que viven de jugar pronto un play-off, para ascender de categoría». «Recibe críticas cuando no gana, pero es un equipo muy competitivo, el que menos goles recibe de la categoría, que es muy fuerte en La Rosaleda, con un ambiente donde no es fácil competir», añadió.
Además, vio al Málaga ascendiendo a Segunda. «Superarán el play-off, porque tienen mucha experiencia, están acostumbrados a jugar con tensión y presión». Por eso mismo comentó que «necesitamos que el contexto sea favorable para nosotros, algo que no será fácil». «Potenciaremos nuestra virtud, intentar dominar -añadió-, y según los espacios que veamos, hacer daño metiendo por ahí el balón llegar con fe al área de ellos para hacer gol».
Es un partido que se merece la afición. «Los jugadores se han ganado el derecho de estar ahí, disfrutando de un gran escenario para jugar al fútbol y cumplir ese sueño de pequeños de jugar en campos como el de La Rosaleda». Se romperán las estadísticas tras el último partido de la Liga de un equipo de Antequera allí, que fue el 5 de marzo de 1995. «Se recordará este partido dentro de unos años y espero que el recuerdo sea bueno».
Finalmente, Medina reconoció que este sábado «habrá momentos que el Málaga van a ir a meter el balón, La Rosaleda va a rugir, va a parecer que van a meter gol, por lo que hay que defenderse con calma, sacar bien el balón y aprovechar las oportunidades, que llegarán».
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