Iturra se retira y exmalaguistas le homenajean entre bromas: «El fútbol pierde un destructor de tobillos»

Conocido como el 'colocho', siempre se ganó el cariño del vestuario por su carácter afable y bromista. El mejor ejemplo está en la sorpresa que le han preparado algunos excompañeros, sobre todo de su primera etapa en el Málaga (la temporada 12-13), a través de un vídeo distribuido en redes sociales. Saviola, Cazorla, Lugano, Joaquín, Demichelis, Baptista, Roque Santa Cruz, Ochoa, Buonanotte, Samu García, Willy Caballero y Camacho, entre otros jugadores, se apuntaron a esta fecha tan señalada para el chileno.

Entre bromas y halagos, los exmalaguistas le felicitaron por su carrera deportiva que ahora pone fin: «Me he enterado que te retiras, ¿eso cómo va a ser? Si tu eres más fuerte que el vinagre», reacción el bético Joaquín. Demichelis sigue este tono cómico para decir que «el fútbol pierde a un gran destructor de tobillos». Y de ahí al «ya era hora» de Mario Husillos, exdirector deportivo del Málaga, quien lo fichó para el club blanquiazul.

Con el Málaga tuvo su mejor época en el año de la Champions. Ese año jugó hasta 39 partidos, siendo un fijo en los planes de Pellegrini. En competición europea jugó 8 partidos, siete de ellos de titular. Y la imagen más significativa fue su pase a Joaquín en San Siro para marcar al Milán. Y fue una gran ausencia en la histórica eliminación contral el Dortmund por sanción. También se recuerda su gol en el Camp Nou al Barcelona en una eliminatoria de la Copa del Rey.

Su vuelta, cinco años después, fue a un Málaga desahuciado que acabó descendiendo tras 10 años en Primera. Pero el vínculo de Iturra con la ciudad es más fuerte que con otros de los destinos donde ha jugado. Siempre se ha sentido muy querido cuando ha regresado a la ciudad, razón por la que decidió mantener casa en la provincia.

Llegó al fútbol español para jugar en el Murcia de Segunda en la campaña 11-12, y al año siguiente pasó a jugar Champions a las órdenes de Pellegrini. Luego, empujado por un fondo de inversión al que perteneció se marchó al Granada, donde jugó dos cursos consecutivos antes de irse al Udinense. Esa misma campaña, la 15-16, volvió a LaLiga como refuerzo del Rayo Vallecano, con el que acabó sufriendo un descenso.

Después de eso se marchó al Necaxa mexicano, donde volvió a recuperar sensaciones y minutos de juego en una temporada y media antes de recalar de nuevo en el Málaga en invierno de 2017. En esta segunda etapa en La Rosaleda vivió el descenso a Segunda y su futuro se diluyó el último día del mercado de fichajes de 2018, ya con Caminero en la dirección deportiva y Muñiz en el banquillo.

Sus representantes le buscaron un lugar en el Villarreal. Un movimiento que el propio Iturra siempre contó entre bromas: «Tengo unos agentes que son magos», contó entre risas alguna vez que otra. Él sabía que su carrera se iba apagando y, tras un breve paso por el Maccabi Haifa de Israel, el final llegó en su país, en el Deportes Iquique. Ahora, quizás se oriente a ser entrenador, tal y como adelantó en SUR en febrero de 2018, cuando se empezó a barruntar su retirada.

«Lo tengo clarísimo. Me encantaría que fuera en la élite, pero esto depende de los resultados», dijo en una entrevista, donde también confesó que los dos entrenadores que le han marcado en su carrera son: «Bielsa y Pellegrini. Sus métodos son muy diferentes, pero con el mismo objetivo. He aprendido mucho con ellos, porque a veces el jugador piensa que se las sabe todas...». El futuro dirá, y quien sabe si volverá a tener una nueva etapa, sería la tercera, como malaguista.