Hugo adelanta a Hicham

«Regalar no se regala nada. Cuando los jugadores están es porque se lo ganan. Valoramos el trabajo, los entrenamientos, disposiciones de juego y perfiles de los futbolistas», dijo en la sala de prensa de La Rosaleda en la previa del duelo ante el Reus, cuando ya se intuía que Hugo estaba cerca de tener una oportunidad. La realidad es que Hugo a adelantado a Hicham, que fue una de las sorpresas en la pretemporada y el primer tramo del curso. La velocidad y el cambio de ritmo del marroquí le convirtieron en uno de los principales recursos ofensivos del equipo y un elemento ideal como revulsivo. El jugador, la pasada campaña en el filial y debutante en esta en Segunda, estuvo en las quince primeras convocatorias ligueras y tuvo minutos (casi siempre de refresco) en todos los partidos menos en tres (entre la undécima y la decimotercera).

Sin embargo, sus prestaciones fueron a menos. Era difícil mantener el nivel inicial, cuando dio un pase se gol en Lugo, marcó ante el Córdoba, forzó un penalti en la Copa... Con todo, no fue una sorpresa que tras dos partidos sin contar para Muñiz empezase a jugar con el Malagueño en Segunda B. En la progresión de los jóvenes es clave competir cada fin de semana, y no estar parado sin hacerlo. Fue fijo en sus tres primeros encuentros, con dos goles, y salió de suplente en el cuarto, el domingo en El Ejido (0-0).

Al mismo tiempo se produjo el salto de Hugo, beneficiado por el hecho de que sólo hay un peldaño entre el primer equipo y su filial este curso. Lo curioso es que este extremo, que lleva muchos años en La Academia, empezó la temporada en el juvenil de División de Honor, pero se convirtió pronto en uno de los elementos importantes del Malagueño. En siete partidos marcó dos goles y se afianzo como titular, y en las últimas semanas Muñiz le había llamado para muchos entrenos. El domingo no se amilanó con los 'mayores' en una coyuntura difícil, con un marcador en contra ante el Reus.Encaró rivales desde la derecha, y dispuso de dos buenas ocasiones de gol. Extramotivado, le faltó la guinda del gol.