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El Málaga prepara el partido contra el Huesca de este domingo en La Rosaleda (18.15 horas). Busca olvidarse del chasco sufrido con la derrota ante el Fuenlabrada y volver a ganar en casa después de cuatro meses sin celebrar un triunfo como local. En mitad de esta situación reaparece el medio centro Genaro, que se entrenó con el equipo dos meses después de pasar por el quirófano a causa de una rotura de menisco.
Por el momento, el polivalente futbolista se está reincorporando de manera progresiva y sólo realizó algunos ejercicios concretos junto a sus compañeros.«Es una alegría inmensa poder entrenar con el equipo de nuevo. Poco a poco sigo cogiendo ritmo para competir cuanto antes», comentó Genaro en sus redes sociales. Su presencia entre la plantilla de nuevo es una imagen positiva, esperanzadora.
Pero sobre todo una gran noticia para el jugador, que encara la recta final de su recuperación y piensa ya en volver verse en competición con la aspiración de recuperar su lugar en el último tramo de la temporada. Una vez estabilizada su situación será más sencillo empezar a hablar sobre su continuidad en el club en las próximas temporadas.
En su contrato con el Málaga, que firmó el pasado verano, contaba con una opción de renovación automática por un porcentaje de partidos disputados, pero la lesión le ha impedido alcanzar el números suficiente de ellos. De igual forma, el club ya le trasladó su satisfacción antes incluso de su lesión y, por el momento, sigue en pie esta postura.
Para el entrenador Natxo González, que no ha podido contar con él aún porque se lesionó antes de su llegada, la recuperación de Genaro se presenta como un 'fichaje' más para la zona de contención del equipo, porque puede actuar tanto en el centro del campo como en el eje de la zaga. Incluso durante un tramo de la temporada ofreció una versión ofensiva sorprendente logrando dos goles de forma consecutiva.
Su lesión dejó en su momento contra las cuerdas al centro del campo blanquiazul, porque se había hecho con un hueco fijo después de la lesión de Luis Muñoz. En los próximos días y entrenamientos se conocerá algo más de la progresión de Genaro y de sus opciones de volver a una convocatoria.
De todas formas, volver para el partido contra el Huesca se antoja precipitado. Y una vez consiga vestirse de corto de nuevo, tampoco le será fácil recuperar su lugar en el centro del campo blanquiazul si Jozabed, Febas o Escassi siguen ofreciendo las sensaciones que tienen en estos momentos. Aunque, si no llegan los resultados, los cambios están asegurados.
Tras los pasos de Genaro está Luis Muñoz, que aún sigue su proceso de rehabilitación en solitario junto con el técnico Toni Tapia. Su lesión de rodilla fue mucho más grave, por lo que los plazos no se pueden comparar por más que ambos pasaran por el quirófano.
Conscientes de su situación, el club se pronunció en redes sociales sobre Luis Muñoz para apoyarle e intentar que no desespere en su recuperación, a pesar de que sus tiempos son algo más complicados de asimilar. El medio centro malagueño, como Genaro, también cuenta con la esperanza de disponer de algunos minutos de calidad antes del final de la campaña y que sirvan para llegar con más entusiasmo a la siguiente pretemporada.
Igual que Juande, el otro de los dos jugadores del Málaga que ahora mismo ocupan la enfermería. El defensa central tiene para un mes después de sufrir una recaída. Con todo esto, el equipo blanquiazul no espera contar con nuevas altas para el siguiente partido más allá de Peybernes e Hicham, que ya completaron los últimos entrenamientos de la semana pasada pero que no tomaron parte en competición como prevención.
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