Los canteranos dieron la cara por el primer equipo, pero acabaron cayendo contra el Alcorcón (0-2)

Fueron Dani Barrio, Orlando Sá y Rahmani. El resto, todos fueron jugadores de la cantera. Algunos más habituales que otros con el primer equipo, hasta el punto de que varios de ellos debutaron en esta ocasión, en mitad de un ambiente enrarecido por la incertidumbre y la preocupación de cómo podrá llegar el primer equipo al estreno liguero dentro de una semana.

Con esa losa, Pellicer reunió a hasta 18 canteranos para darles la oportunidad de mostrarse y sacar algo positivo de esta esperpéntica situación, donde prácticamente el filial sustituyó al primer equipo. Una gran parte de estos canteranos ya acumulan numerosos entrenamientos con el primer plantel, pero otros llegaron sin apenas haberse entrenado. «Han jugado chicos que llevaban un mes sin entrenarse y han competido (sobre el encuentro ante el Alcorcón). Estoy contento y orgulloso de ellos y del trabajo que se ha hecho en los entrenamientos durante toda la pretemporada», informó y valoró el técnico malaguista. Eso se notó en la intensidad del partido.

También porque era el primer partido amistoso del Alcorcón en esta fase de preparación, ya que los anteriores choques programados fueron suspendidos por casos de coronavirus en sus diferentes rivales. Los jóvenes malaguistas aguantaron el tipo en general aunque dos acciones puntuales desequilibraron la balanza para el conjunto madrileño, que sí jugó con sus profesionales.

A pesar de la disciplina en la colocación, con el sistema exitoso de Pellicer –en el que emplea a tres centrales y dos 'carrileros'–, faltó movilidad, compenetración y hubo algunas imprecisiones técnicas de bulto de jugadores que habían llegado al partido sin apenas una sesión de entrenamiento con balón tras todos estos meses de confinamiento. Eso se notó en los dos goles de la victoria de los alfareros, que fueron precedidos de dos desajustes puntuales.

Marcó el almeriense Barbero en el minuto 41 y luego lo hizo Marc Gual, en el 66. En el aspecto ofensivo, el Málaga apenas tuvo ocasiones claras de cara a portería. Rahmani fue uno de los más activos al principio, con varias internadas y un leve disparo. Luego le siguió Iván Jaime, que incluso forzó un penalti que el árbitro no pitó. Por otro lado, Orlando Sá estuvo mejor que en citas anteriores y mostró que sigue evolucionando en lo físico. Posteriormente, con los cambios, los delanteros Hoyos y Julio tuvieron una oportunidad cada uno.