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Está siendo la temporada del afianzamiento definitivo de Luis Muñoz (Málaga, 1977) en el primer equipo tras dos cesiones los últimos años (a Lugo ... y Córdoba). Beneficiado por un Málaga de estrecheces, aprovechó la oportunidad para demostrar su valía, aunque ahora esa misma coyuntura le tiene entre la espalda y la pared al acabar su contrato de blanquiazul y no poder recibir una propuesta de renovación por la sanción de LaLiga sobre el club (pueden firmar otro contrato, pero eso no le asegura poder ser inscrito la próxima campaña). Como en el campo, ante los medios también ha dado un paso adelante y se explica de forma nítida sobre su situación y otros asuntos de la actualidad malaguista.
-Le pillo en casa. Toca aguantar ahí lo máximo posible, ¿no?
-Nosotros lo tenemos muy claro. Lo más importante es no contagiarnos porque de lo contrario estaríamos apartados del grupo y sería perder dos semanas de entrenamientos.
-Pregunta obligada, ¿cómo encajaron el anuncio del ERE?
-Tenemos mucha confianza en el administrador, en el director deportivo y en los entrenadores. Ellos nos transmiten cada día lo que realmente está pasando. Claro que no nos gusta que pase esto. Se va a ir gente que conocemos en el club y espero que se arregle todo lo antes posible. También nosotros tenemos un poco que apartarnos de esto porque no nos va a ayudar a competir el día de mañana. Son días difíciles por el coronavirus, porque aún no nos entrenamos al completo y porque aún no se sabe cuándo volverá la Liga. Tenemos la cabezapuesta en los entrenamientos del día a día más que nada. Nosotros intentamos apartarnos de todo eso porque no nos viene bien. Sí es bueno que estemos en lo deportivo, donde ahora mismo vamos espectacular. Nos entrenamos bien y todos estamos a gusto.
-Y sobre una posible rebaja salarial en la plantilla... ¿aún sin novedades?
-Que yo sepa no. Eso lo estarán haciendo de forma individual. No tengo ni idea. Tenemos que centrarnos en lo deportivo.
-¿Su caso es diferente?
-Sí, creo que yo seré uno de los sueldos más bajos de la plantilla y creo que a mí no me llamarán. Pero no sé qué pasará, quiero estar pensando en los entrenamientos y en no lesionarme. Con ganas de que empiece la Liga.
-Acaba contrato. Su situación es conocida. Está esperando al club para que pueda ofrecerle algo para el año que viene. ¿Hasta cuándo durará la paciencia?
-Ya lo hablé con Manolo Gaspar (director deportivo) y le dije que iba a esperar hasta el último momento, que no iba a abandonar el barco en este momento. Pero, bueno, a ver, si que es verdad que hay equipos que me llaman... pero yo principalmente estoy esperando al Málaga, que se arreglen las cosas y me pueda quedar aqu. Me encantaría. Ahora está en el aire lo que pasará con el club. Si me tuviera que ir, lo haría con todo el dolor de mi corazón pero tendría que asumirlo. Ahora mismo no hay nada nuevo y pienso sólo en lo principal, que es lo deportivo, que es lo que nos podrá ayudar a todos.
-Le pido un balance de lo que llevan de esta 'pretemporada'.
-Hemos llegado muy bien y las pruebas físicas que nos han hecho las hemos pasado sin problemas. Ahora cada semana nos encontramos mejor, pero aún nos queda un poco para llegar al ritmo al que estábamos acostumbrados. Pellicer siempre nos transmite que lo más importante es no lesionarnos y estar todos disponibles. Sobre la marcha nos comenta que lo primordial es empezar con buen pie, como contra el Huesca en casa, que será el primer partido. Y que nos cuidemos e intentemos quedarnos en casa, y si salimos, siempre con mascarilla. El entrenador es una persona ganadora y desde ya nos está diciendo que hay que ir a ganar todo lo que queda.
-Y en estos últimos días, acostumbrándose al calor. Tocará jugar con altas temperaturas.
-Es verdad que puede ser uno de los factores que peor llevemos porque en Málaga, cuando se meta el calor, lo vamos a pasar un poco mal. Habrá partidos con terral y, por mucho que se juegue a las nueve, va a costar una barbaridad. Ahora por las mañana lo vamos sobrellevando.
QUEDARSE EN MÁLAGA
tras el anuncio del ere
-¿Vio cómo se reanudó la Bundesliga?
-Sí, vi el Dortmund-Schalke. Fue un poco extraño porque se escucha a los jugadores y a los entrenadores cuando antes más que nada se escuchaba a la afición. Y en los goles solo se escucha al comentarista. Es raro.
-¿Tendrá que controlarse un poco más?
-Yo intento gritar cuando puedo ayudar a un compañero; nunca lo hago para llamarle la atención porque todo el mundo falla y nadie es perfecto. Siempre he tenido en mente que en esos casos es mejor ayudarle con cosas positivas y no con reproches.
-¿Ha jugado algún partido a puerta cerrada?
-No, la verdad es que no lo he hecho nunca. A un futbolista, cuando juega en su campo, le gusta estar arropado por su afición y es algo que te ayuda. Cuando se va al campo de un rival, no es que nos cueste más jugar; es que los rivales se ven mejor porque cada ocasión la celebra la gente y es un empujón.
-¿Para el siguiente paso a los entrenamientos con todo el equipo parece que habrá que esperar todavía?
-Sí, creo que habrá que esperar un poco más. Aunque no tengo mucha idea, en esto hay que ir día a día y ver lo que pasa. Mientras más pronto posible, mejor. Aun así, el protocolo que estamos llevando es espectacular.
-¿Qué es lo que tiene muchas ganas de hacer cuando se pueda salir sin restricciones?
-Ir a la playa, pegarme un baño y luego ir a comer espetos a algún restaurante. Es una cosa muy sencilla que ahora se hace muy complicada. También estar con la familia y los amigos. Hago videollamadas, pero estar en una mesa todos juntos y charlar, discutir... Eso lo echo de menos.
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