
Nueva jornada en las 'oficinas' de La Rosaleda. El Málaga continúa preparando su vuelta a la acción el próximo sábado en Alcorcón (18.15 h.). Una cita crucial para cortar la mala racha de resultados donde el rival llega igual o más necesitado de ganar al ser el actual colista de la categoría. En el equipo blanquiazul se vive esa presión con naturalidad y el plantel se entrenó este jueves en una sesión de trabajo más distendida, para descargar piernas.
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Entre el grupo de efectivos se pudieron ver de nuevo a los jugadores Ale Benítez, Gonzalo y Larrubia, tres canteranos habituales en el primer equipo que fueron baja durante la semana pasada por haber estado en contacto con un compañero del equipo filial que dio positivo en covid-19. Tuvieron que guardar un periodo de aislamiento domiciliario preventivo como el resto de integrantes del Atlético Malagueño. Por suerte, no se detectó ningún nuevo contagio por el momento. Así las cosas, el primer equipo pudo tirar de tres jugadores más para «una sesión de descarga por espacio de algo más de una hora»
«Tras una primera parte de activación en el Anexo, el grupo se dividió en tres, dos de los cuales se quedaron arriba haciendo fútbol-tenis y centros y remates, mientras que el tercero se ejercitó en el campo principal de La Rosaleda», detallaron desde los medios del club. El equipo que dirige Pellicer volverá este viernes al césped para ejecutar el último entrenamiento antes de enfrentarse al Alcorcón. Tras esta última sesión de la semana está prevista la habitual rueda de prensa previa a un partido del entrenador.
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