El Málaga empata con el Sporting (2-2)

Enfrente estará a las 18.15 horas (Movistar LaLiga2) un buen espejo en el que mirarse. El Sporting se desplomó desde el liderato (acumuló 21 puntos en los primeros 10 partidos) hasta la decimoquinta plaza después de una racha de diez encuentros sin ganar (sólo tres empates), pero en el club gijonés no perdieron los nervios, despejaron balones sobre un posible relevo en el banquillo y ahora confían en la remontada después de la victoria en Ibiza (0-2) y, sobre todo, el zarpazo copero al Villarreal. La excesiva dependencia de Djurdjevic, ausente durante gran parte de esa terrorífica racha, pasó factura, pero el grupo se mantuvo unido y fiel a su técnico, David Gallego.

En La Rosaleda se pasó en el último partido de 2021 del reproche a los jugadores (se escuchó el «Échale huevos») a la petición de dimisión del entrenador, José Alberto. Las culpas parecían repartidas hasta que los futbolistas, en esa liturgia final ya habitual en el recinto de Martiricos, fueron aplaudidos desde la Grada de Animación como si quedaran exentos. ¿Se mirará con lupa esta tarde de nuevo al técnico? Esa es la incógnita, aunque el mensaje del club –como sucedió en Gijón durante un otoño crítico– no ha podido ser más contundente respecto a la confianza en el preparador natural de Oviedo y con corazón sportinguista.

La ilusión del malaguismo parece renovada por la llegada de Vadillo (extremo al que le sobra desequilibro y le falta confianza) y Febas (organizador engullido por el estilo cada vez más físico de la Liga), pero choca de bruces con la realidad. José Alberto vuelve a contar con una numerosa lista de jugadores de baja o, al menos, cortos de ritmo. Ya asoman Sekou, Juande y Jozabed, pero otra cuestión es si se encuentran para competir con todas las de la ley. Encima, un fuerte catarro aparta hoy a Chavarría, cuyas sensaciones mejoraron en Alcorcón. Por idéntico motivo tampoco estará Antoñín, aunque desgraciadamente esta no sea hoy por hoy una ausencia llamativa. El técnico sí recupera a Brandon una vez cumplido su partido de sanción por acumulación de amonestaciones, pero en líneas generales son numerosas las incógnitas respecto a la alineación, en la defensa, en la medular y en ataque. Pero, sean quienes sean los elegidos, todos deben salir con un objetivo: recuperar la identidad perdida.