Dani Pacheco, cerca de incorporarse al Logroñés

En julio del pasado año fue operado de una lesión de talalgia, la que le impidió jugar de malaguista en la recta final de la pasada campaña. La crisis en el club, que se vio obligado a impulsar un ERE también entre la plantilla para deshacerse de los jugadores con salarios inasumibles para su nueva realidad económica (ahora es el equipo con menos presupuesto de Segunda), incluyó a Pacheco en la lista de los ocho jugadores que salieron del equipo por esta vía. Desde ese momento, el interés del banda fue siempre recuperarse al cien por cien para volver a la circulación.

Casi seis meses después de cerrar su adiós en el Málaga, donde no pudo ofrecer el rendimiento que se esperaba tras su llegada en el primer año tras el último descenso de la entidad blanquiazul, Pacheco está cerca de emprender una nueva etapa en su carrera. El Logroñés, donde la parcela deportiva la gestiona el que también fuera jugador del Málaga, Carlos Lasheras, le ha abierto las puertas del club riojano, que busca la permanencia en la categoría tras ascender el verano pasado.

Pacheco era junto a Cecchini y Boulahroud, uno de los únicos jugadores despedidos de la disciplina malaguista el pasado octubre que continuaban sin equipo. El resto fue firmando con nuevos clubes con el transcurso de los meses. La mayoría en lugares del extranjero, los únicos destinos que podían alcanzar sus fichas, o que fueron las mejores ofertas disponibles. Juanpi con el Al-Ain de Arabia Saudí; Luis Hernández con el Maccabi Tel Aviv, Rolón en Huracán, de la Primera argentina, Renato se fue al Volos, de la Primera de Grecia y Diego González promocionó para jugar en el Elche.