Continúan los trabajos para convertir el estadio de atletismo en el nuevo campo del Málaga

Los estudios de pilotajes de la zona en la que está ubicado el estadio de atletismo Ciudad de Málaga son una de las claves de esta parte del proyecto. Desde el Ayuntamiento insisten en este asunto para que la instalación suplente para el equipo blanquiazul y sus aficionados disponga de la máxima seguridad. Todavía está pendiente el aforo exacto que podrá disponer este campo, si bien las fuentes consultadas aseguran que dispondrá de alrededor de 26.000 asientos.

Los plazos comienzan a estar más claros, aunque también pueden cambiar. En principio, el Málaga completará también la temporada 2025-26 en La Rosaleda, sin que hayan comenzado las obras plenamente en el interior del estadio de Martiricos. Es previsible que antes se puedan realizar los trabajos previos alrededor del campo, pues el proyecto incluirá gran parte de la parcela situada al norte del estadio, donde, entre otras cosas, se encuentran el Anexo o el instituto Guadalmedina.

El alcalde Francisco de la Torre comentó hace varios meses que los trámites administrativos impedirían que las obras de La Rosaleda comenzaran antes del primer trimestre de 2026. Esto permitiría que el Málaga pudiera completar tres meses después la temporada en curso. Será a partir de ahí cuando tenga que estar ya en marcha el campo modular en el estadio de atletismo. Aunque lo más probable será que durante la campaña que viene desaparezca el Anexo como terreno de entrenamiento habitual (se desconoce cuál será la fecha exacta).

Desde el Málaga se está planificando el cambio del cuartel general del equipo blanquiazul, que deberá trasladarse para el día a día del trabajo a La Academia, donde dispone de unas instalaciones que tendrán que complementarse para que los jugadores de Sergio Pellicer puedan ejercitarse con todas las necesidades cubiertas. Es imprescindible que esté todo previsto para la temporada que viene.

Aunque continúa la planificación general de la sede malagueña, otros campos españoles que serán también reformados tienen más avanzados los trabajos y, en algunos casos, las obras están ya en marcha. Los responsables de La Rosaleda (Junta de Andalucía, Ayuntamiento y Diputación) pretendían ofrecer una rueda de prensa para comunicar cuál es la situación en este momento, pero esta comparecencia se sigue demorando. Es previsible, en cualquier caso, que haya alguna novedad en breve.

Desde la sede malagueña tendrán que concretar el proyecto y los plazos de las futuras obras, pues es necesario que cumplan con los requisitos y las fechas previstas. Pero también tendrán que conocer los datos al detalle todos los afectados, fundamentalmente el club de Martiricos, que deberá marcharse del estadio durante un par de temporadas para que se puedan realizar las obras de la forma más rápida posible.

Y todo ello en mitad de la polémica que está generando el propio presidente de la Federación Española, Rafael Louzán, que apuesta abiertamente por la entrada de Valencia como sede del Mundial, pero lo peor es que insinúa que podría ser a costa de una de las actuales. Habrá que esperar, aunque las instituciones no deberían tener ningún temor, siempre que cumplan con los compromisos contraídos para mantenerse en ese grupo de ciudades y campos en los que se disputará el Mundial 2030.