El balón parado vuelve a condenar al Málaga

No hay que remontarse mucho en el tiempo para recordar otro gol encajado en una falta lateral por el Málaga, el de Vigaray ante el Zaragoza (que supuso el 1-2). La zaga tira mal fuera de juego, como contra el Mirandés, cuando Mejías se queda algo clavado para habilitar a Vivian, y otras veces se despista en las marcas individuales, en las clásicas acciones en las que la atención se fija más en el balón que en el posible rematador.

Estas desaplicaciones, de una forma u otra, están suponiendo un castigo severo en relación a los méritos del equipo. Será difícil encontrar un caso más claro que el del partido jugado en Anduva anoche. El Málaga controló la cita con una autoridad inusitada esta temporada, hasta el punto de que no hubo remates del Mirandés ni aproximaciones al área de Dani Barrio en los primeros 70 minutos de partido. Así las cosas, el gol de Vivian llegó justo en el primer intento, que a la postre fue también el último.

Aunque el Málaga perdió parte de ritmo en su ofensiva en la segunda mitad, en la primera ya gozó de dos oportunidades clarísimas, las de Luis Muñoz (remate desviado por Vivian que se estrelló en el poste) yChavarría, que obligó a lucirse a Lizoain en un testarazo a centro de Rahmani. Además, botó numerosos saques de esquina (nueve) y remató en catorce ocasiones (cuatro entre los tres palos), pero no estuvo afortunado.

Gracias a su buena presión adelantada tuvo a raya al Mirandés buena parte del choque, pero no lo apuntaló con un gol, después de que en varias salidas ligueras (como en Castellón, Zaragoza o Alcorcón) fuera capaz de ganar en duelos casi con un cien por cien de eficacia en sus ocasiones.

En una categoría marcada por la igualdad, la puesta en escena de las acciones de estrategia cobra un valor añadido, y el Málaga está saliendo muy penalizado por ellas. No sólo no les saca suficiente rédito en ataque, sino que sufre sobremanera (entre los que más en Segunda) a nivel defensivo, sólo una campaña después de haber sido el conjunto menos goleado de la competición. Precisamente con el gol de ayer de Vivian, el Málaga ya ha recibido a estas alturas más tantos (34) que en todo el curso anterior (33), cuando quedan aún quince jornadas por celebrarse, un dato más que sintomático.

El Málaga vuelve con dos de sus piezas más importantes con problemas físicos de una gravedad aún por determinar. Pablo Chavarría se someterá hoy, con casi total probabilidad a pruebas diagnósticas en su rodilla izquierda para conocer el alcance de su lesión, después de un choque con Vivian cerca de la línea de fondo mediada la segunda mitad. El jugador regresó al campo tras ser atendido, pero pronto descubrió que no podía seguir. Además, Luis Muñoz sufrió un golpe en su tobillo izquierdo, en la jugada en la que vio la amarilla Álex López, pendiente de evolución, y fue suplido por Ramón.