Alarma... en la segunda jornada liguera

A día de hoy, la etapa de Guede al frente del equipo se salda con unos paupérrimos ocho puntos sobre treinta, si se suman las ocho jornadas del final de la Liga 2021-22 (tras su debut ante el Valladolid) con el arranque de esta. En concreto, lleva cuatro derrotas consecutivas: el infausto 0-1 ante el Burgos, el 1-0 final del torneo en Lugo, otro 1-0 para empezar este campeonato en El Plantío y el 0-4 de anoche, el marcador más duro.

Hay más datos desalentadores. Tras doce fichajes y una nueva revolución en la plantilla, en especial en el ataque, el equipo no ha puntuado y encadena la friolera de 402 minutos sin marcar un solo gol, desde el 0-2 de Febas en Tenerife en la trigésima sexta jornada.

Sin goles no hay paraíso, pero menos aún sin un entramado defensivo sólido. Guede reclamó «paciencia» respecto a la construcción del equipo en la víspera del duelo ante Las Palmas. Sin embargo, más allá de que se ha medido a rivales más rodados como el Burgos y Las Palmas (con menos cambios en sus filas), los tres primeros goles de anoche muestran unos desajustes defensivos enormes. Primero, en un contragolpe letal por el centro; después, en un saque largo de Valles que permite a Óscar Clemente habilitar a Marc Cardona a la espalda de Luis, sin ninguno de los tres zagueros centrales bien ubicados. Y en el 0-3, Álvaro Jiménez irrumpe a la espalda de Víctor Olmo.

A todo esto se suman los continuos cambios de sistema de juego, que dificultan la construcción de una base sólida. Anoche el equipo partió con un 4-4-2, con rombo en el centro del campo, y con cinco cambios respecto a la primera alineación liguera, la de Burgos. Acabó con nuevo dibujo táctico, y concediendo casi una veintena de remates al rival.