Aficionados del Frente Bokerón, en el punto de mira por ceder su abono a hinchas de la Lazio

El Frente Bokerón, grupo de aficionados del Málaga, vuelve a estar en el punto de mira, esta vez por incumplir una normativa que se exige a las gradas de animación de La Liga. Ocho miembros de este sector de La Rosaleda cedieron sus abonos a aficionados de la Lazio (afición 'hermanada' con cierta facción del grupo malaguista) para el partido del conjunto blanquiazul frente al Zaragoza, el pasado 26 de enero.

La normativa que establece el Reglamento General de La Liga, prohíbe la cesión de abonos, indicando que «la venta de títulos o documentos de acceso de temporada o media temporada, con independencia de su denominación, requerirá que el aficionado facilite, junto con otros datos que establezca la regulación del organizador de la competición, aquel dato biométrico que se determine, debiendo recabarse el consentimiento del interesado informando claramente de las concretas finalidades para el tratamiento de los referidos datos de carácter personal, de conformidad con la normativa vigente en materia de protección de datos de carácter personal. En el momento de la adquisición del título de acceso, por parte del Club/SAD afiliado, se asociará al aficionado con la filiación facilitada y el dato biométrico».

La Policía identificó y expulsó a los ocho aficionados italianos, una vez se dieron cuenta de que no correspondían con la de los titulares de dichos asientos. El club ha abierto un expediente sancionador a los aficionados blanquiazules, que con toda seguridad perderán su abono, como ha informado 'La Opinión' y ha podido confirmar este periódico.

Es importante recordar que el presidente de La Liga, Javier Tebas, anunció en la comisión de igualdad en el Congreso de los Diputados que «se trabaja en la disolución e ilegalización del Frente Bokerón», tras protagonizar varios altercados esta temporada. El primero, durante la víspera del Deportivo-Málaga, cuando provocaron graves destrozos en un establecimiento de La Coruña, y recientemente en la previa del Marbella-Atlético de Madrid, en la que tuvo lugar una batalla campal contra los radicales rojiblancos en los aledaños de La Rosaleda.