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Domingo, 12 de febrero 2023, 17:41
'La prórroga del Bar Estadio' es un espacio reservado para las opiniones de los aficionados del Málaga sobre su equipo. Recabamos sus mensajes después de cada nuevo partido del conjunto blanquiazul. La participación está abierto a todo el que desee expresar su punto de ... vista. Para hacerlo sólo hay que dirigirse a la cuenta de @SURDeporte en Twitter por mensaje directo y enviar el texto-opinión acompañado de una foto de busto.
«El Málaga CF volvió a demostrar su inestabilidad. Aunque parecía que la suerte sonreía por una vez y se le daba la vuelta al marcador, la realidad terminó siendo muy distinta. El partido empezó con el Albacete mereciendo ganar desde bien temprano, y realmente así fue. Dos zarpazos en jugadas aisladas -algo poco común en la puntería blanquiazul- dieron las esperanzas de poder sacar los 3 puntos. Sin embargo, Luis Muñoz decidió pegarse un tiró en un pie y dejar a sus compañeros con uno menos. Da igual el árbitro, da igual lo que haya dicho. Es de alevines el error que comete y a la vista está con el enfado de Pellicer. En la segunda mitad, nada que hacer. El conjunto manchego abrió el grifo y el Málaga terminó sucumbiendo. Un resultado que corto para lo que pudo haber sido.El Málaga ya se ha ahogado y sale, además, con mala relación del Carlos Belmonte con los malaguistas que han ido a apoyar al equipo. Cualquier otra cosa que no fuese el descenso sería resucitar y, de momento, no creo en los milagros».
«Ni el cambio de entrenador, y ya van tres, hace que el equipo mejore. En el partido en Albacete han llegado a remontar con dos goles a balón parado y parecía que hoy era el día, pero llega Luis Muñoz y ¡se autoexpulsa! Eso no se puede permitir, que un jugador rompa así un partido en la situación que está el equipo. A partir de ahí nos han podido meter seis goles porque la defensa sigue siendo nefasta y seguimos regalando. Somos el peor equipo en Segunda y ya no se ve luz».
«Luis Muñoz no debería volver a jugar en el Málaga. Un capitán, en esta situación y habiendo remontado como visitante, no se puede autoexpulsar. Era una situacion idónea, ganando fuera y una semana antes de la visita del Zaragoza a La Rosaleda... una 'niñateria' nos hunde todavía más, como ante el Oviedo la semana pasada. Ya se fue el penoso director deportivo que hemos tenido y también lo hicieron varios entrenadores, y ya es hora de mirar y castigar como club y afición estas actitudes 'mononeuronales' que entierran cualquier esperanza. Ni los desplazados ni sus compañeros merecen que un capitán que protagoniza semejante despropósito. Lo dicho, afición y club deben castigar esto».
«Un capitán no puede tener esta actitud y menos borrarse de esta manera. Pellicer tiene que estar cabreado y con razón. Tras la roja de Esteban Burgos ya avisó de que esto no volvería a pasar y una jornada más tarde se repite. El equipo con revolución en el once estaba en su mejor momento. Remontada fuera de casa y jugando bastante bien. Mucho más no podíamos pedir. Hasta que en el 38 a Luis Muñoz se le va la cabeza del partido. No puedes jugártela de esta forma con amarilla. Tras esta acción se preveía lo peor. El Albacete aprovechó la ventaja y remontó el partido en la segunda mitad. El Málaga bajó los brazos y apenas pudo intentarlo. Una pena por todos los malaguistas desplazados. Este equipo no merece esta afición. No me gusta decirlo, pero estamos prácticamente descendidos».
«Revolución en el once inicial por parte de Pellicer, se encajó un gol en los primeros minutos y aún así se logró remontar. Luego llegó la autoexpulsión de Luis Muñoz, estando con un marcador de (1-2) a favor, siendo el segundo partido consecutivo con expulsiones inadmisibles. Un capitán no puede hacer eso, esto no puede pasar. Se llegó así al descanso pero se mascaba que era cuestión de tiempo que los locales remontasen y así fue, en menos de veinte minutos. Reiterados fallos defensivos que permitieron al rival lograr tres goles y de milagro no se encajaron más. Otra derrota, y ya se empiezan a ver situaciones de equipo sentenciado. Cada vez creo menos y parece que es cuestión de tiempo el descenso. Desgraciadamente parece que todos están superados».
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«De donde no hay, no se puede sacar. Un partido más para olvidar, un partido más con una falta de respeto abrumadora y falta de disciplina sobre el campo. La situación es deleznable. Cada vez veo peor al equipo, donde había un atisbo de esperanza con un luchador Mel al cargo, ahora nada más hay desgana y falta de coherencia; y cabeza fría en los jugadores. Lo único medio positivo, han sido las dos jugadas a balón parado exitosas, pero no nos sirve de nada si luego no lo acompañamos con garra, inteligencia y picardía a la hora jugar. En resumen, cuesta abajo y sin frenos».
«La desesperación crece y le come cada vez más terreno a una esperanza que ya muchos han enterrado. Y nadie puede culparlos, porque son innumerables los contextos de partido que ha vivido el Málaga y no parece aprovechar ninguno. Es cierto que, en el día de hoy, ha sabido remontar un partido que se puso cuesta arriba en el 3'. Pero el propio Málaga parece querer añadirle dificultad al asunto. Remonta en el campo de un equipo de playoff e, inmediatamente, su capitán se auto expulsa de manera ridícula. Pretexto perfecto para volver a caer, para volver a no sumar ni un punto y, para que los que vuelven desde Albacete habiendo salido de madrugada para ver a su equipo piensen que todo esto es como la expulsión de su capitán».
«Un club que se autodestruye con jugadores que se autoexpulsan; jugadores que se encaran con el mayor patrimonio de este club, que es la afición; jugadores que arrastran este escudo semana tras semana; jugadores (algunos) que la temporada pasada consiguieron la permanencia por culpa de la mediocridad de 4 equipos y no se merece repetir ese milagro en la presente temporada. Todo esto apoyado en una serie de jefes de área, que no tienen capacidad ni experiencia ni conocimientos ni aptitudes necesarias para dirigir un club de fútbol, secundados por el jefe mayor que es el administrador judicial, José María Muñoz, que se parapeta primero en los entrenadores que han ido pasando, después por el ya ex director deportivo, y ahora con el nuevo director general. Lejos de analizar toda esta concatenación de errores y circunstancias, se improvisa y se chulea a los pobres aficionados que sufrimos y padecemos esta institución llamada Málaga Club de Fútbol. Esto no tiene por dónde cogerse. Agotado y derrotado. Otro clavo más en nuestro ataúd».
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