El Málaga y su endémico déficit en las bandas

La carencia de efectivos en los extremos (agudizado esto por las continuas lesiones en futbolistas de esta demarcación) y el pobre nivel de los laterales restan potencial a la propuesta de Mel para conseguir progresos en cuanto al juego del equipo y minimizan las opciones de salir a flote del conjunto blanquiazul. Son motivos suficientes para considerar que es urgente la necesidad de incorporar a varios especialistas de banda, tanto en ataque como en defensa, cara al mercado de fichajes que se abre en enero, pero en el que la dirección deportiva lleva trabajando desde semanas atrás para analizar y corregir sus errores de la planificación veraniega.

El último partido, contra el Levante, fue una muestra más de esta negativa realidad que Mel y su cuerpo técnico intentaron disimular al máximo con un planteamiento más defensivo, con una línea de hasta cinco efectivos en la zaga, y concentrando su única vía de ataque en el contragolpe tras robo de balón al rival en el centro del campo. Y así llegaron las mejores ocasiones que no pudo aprovechar un Rubén Castro de capa caída. Lograron generar la sensación de contener a un rival claramente superior y que, sin estar muy inspirado, se llevó la victoria por un solitario gol al mínimo fallo blanquiazul, pero esto no debe esconder la lectura sobre la debilidad y la falta de recursos.

Los laterales, Javi Jiménez por la izquierda y Juanfran por la derecha, volvieron a ofrecer un nivel pobre, sin apenas aportar al juego del equipo desde sus posiciones. Poco contundentes en defensa y nulos en ataque, e incapaces de crear superioridades ni poner centros intencionados al área rival a pesar de encontrarse con el carril libre al no jugar un extremo por delante y al estar más resguardados en defensa por los tres centrales. Es decir, el Málaga fue inoperante en una faceta fundamental del juego. Y lo peor es que esta es una situación que se ha agravado con las lesiones recientes de posibles laterales y extremos. Desde la lesión de rodilla de Haitam (se pierde lo que resta de temporada) en el anterior choque frente a la Ponferradina hasta las molestias físicas del canterano Cristian y Álex Gallar, pasando por la fractura de nariz de Bustinza.

Por eso, todo apunta a que el Málaga reciba al Granada de nuevo sin más opciones para las bandas, más allá de Hervías y de nuevos filiales como Issa Fomba o el último en subir a entrenar con el primer equipo, Juanmita, que se ejercitó ayer a las órdenes de Mel. El preparador blanquiazul sigue tirando del segundo equipo en busca de apariciones en forma de refuerzos desde la cantera como este curso viene siendo el propio Cristian, ahora 'tocado'. No queda otra, al menos hasta que lleguen nuevos jugadores aprovechando la ventana de transferencias que se abre en unas semanas.