Los VTC convocan paros en el aeropuerto en plena temporada alta contra la tasa de recogida

Y no es el único. El sector del transporte de viajeros por carretera (taxis, VTC y coches de alquiler) está dispuesto a plantar batalla contra una medida que consideran abusiva. Y ya se empieza a hablar de movilizaciones a las puertas de la temporada alta. De momento, la patronal VTC Andalucía ya ha votado en asamblea convocar paros parciales en el aeropuerto a partir del próximo 1 de julio. «No quieren entender que las empresas no pueden soportar un sobrecoste de 400 euros mensuales por coche», remarca Pablo García, presidente de esta asociación que también ha denunciado la imposición de esta tarifa ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). «No tiene sentido imponer esta tasa, y menos aún en pleno verano. En Palma han decidido posponer las conversaciones hasta finales de año», insiste el representante de un sector que en la provincia cuenta con 2.427 coches.

¿Qué harán el resto de gremios? De momento, están a la espera de cómo evolucionen los acontecimientos para convocar sus respectivas asambleas y decidir si se acaban sumando a esta protesta. «Estamos abiertos al diálogo, pero ya le hemos advertido a los responsables del aeropuerto que nos están dejando en una situación complicada y que si se pone tensa nos plantearemos hacer algo», advierte Miguel Ángel Martín, como presidente de la Confederación de Taxis de la Costa del Sol, que aglutina a los 2.300 coches que conforman la flota de todo el litoral desde Manilva hasta Nerja y que también ha pedido apoyo a los ayuntamientos para que presionen a Aena y al aeropuerto. Lo que reclaman unos y otros es que, al menos, se les instaure un periodo gratuito de cortesía de aproximadamente media hora. En este sentido, cabe precisar que en los aeropuertos de Madrid y Barcelona se conceden 15 minutos gratis.

Como ha venido informando SUR, esta medida obliga a pagar a todos los VTC excepto los de Uber, que tienen un espacio propio de 18 plazas justo enfrente de la salida de la T-3 a cambio de un canon variable de al menos 25.000 euros anuales; así como a los cientos de entradas que cada día hacen los vehículos de cortesía y de enlace de los 'rent a car' para llevar a los clientes a la nave donde está el coche alquilado e incluso a los microbuses que fletan la veintena de 'parkings' de larga estancia del entorno del aeródromo para quienes dejan su coche en uno de estos garajes. «Cada día tenemos 250 reservas, y en los minibuses de cortesía sólo caben 8 personas, así que la factura al final de cada jornada puede ser tremenda», apunta la responsable de control de una compañía de alquiler de coches.

¿Cuánto tiene que pagar? La tarifa es idéntica para todos los profesionales que accedan a esta zona (cada uno con su entrada y salida diferenciadas), algo más barata del precio que indica los carteles, que es para los usuarios del 'parking' preferente. En cualquier caso, sólo la subida de la barrera, es decir, sólo por entrar en la explanada habilitada para la recogida, cada vehículo tendrá que pagar 1,11 euros. A partir de ahí, se tarificará por minutos en función del tiempo de estancia, de forma que la media hora saldrá por 2 euros y la hora completa, por 3,8. Para hacerse una idea, una hora en el 'parking' de la Marina, que es el más caro de la red municipal de la capital, cuesta 2,38 euros. «He estado sólo cuatro minutos, lo que he tardado en entrar y recoger al cliente que ya estaba esperando, y me ha costado 1,20 euros», explica un conductor de VTC mientras muestra el tique recién salido del cajero. Otro, que ha estado 49 minutos, ha tenido que abonar 3,1 euros.

En principio, también estaba previsto que afectara a todos los taxis que operen en el aeropuerto de forma precontratada; lo que incluye a los 1.300 taxis de fuera de la capital puesto que sólo pueden recoger en el aeródromo previa reserva, así como a todos los servicios concertados que también realizan los profesionales de la ciudad (para carreras sin reserva tienen parada propia). En un intento de rebajar la tensión, la dirección del aeropuerto ha querido dar al taxi un trato diferente, ofreciéndole un espacio gratuito de 15 plazas, justo al lado de la parada del resto de taxis, para que puedan aparcar los que vengan precontratados. Pero tal y como se preveía, ya en el estreno se ha comprobado que es un espacio insuficiente. «Es un martes de junio a media mañana y ya no cabemos. Al final, nos obligan a ir al 'parking' de pago», se queja Manuel Becerra, un taxista de Mijas que asegura que «con esto, el gran perjudicado acabará siendo el cliente». «Entiendo que quieran que se pague para evitar que algunos taxis o VTC se tiren aquí dos horas esperando a que llegue el vuelo y colapsando los accesos, pero podrían cobrar algo simbólico en vez de robarnos desde el primer minuto de estancia», denuncia un taxista que viene de Nerja para recoger a una familia británica. A pocos metros, un agente de la Policía Local cuenta el número de taxis que permanecen en esta zona gratuita mientras otros aguardan en doble fila. «Aquí ya sobran varios, así que tendrán que ir al aparcamiento de pago», le espeta al empleado encargado de controlar esta zona de precontratación.