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La situación de la sanidad pública -y en concreto la realidad de las listas de espera- no deja de causar problemas a la Junta de Andalucía, que este miércoles anunció un plan de choque con una inversión de casi 300 millones de euros, al tiempo ... que la propia Consejería de Salud reconocía -sin que los datos sean públicos- que estas listas habían vuelto a crecer en el balance de diciembre tras un resultado de junio (el último conocido) que era especialmente negativo.
En concreto, este Plan de Garantía Sanitaria puesto en marcha por la Consejería de Salud y Consumo contará en su primera fase con una inversión de 283,3 millones de euros con el objetivo de reducir «de manera significativa» la lista de espera quirúrgica dentro de los procedimientos garantizados (90, 120 y 180 días). Aseguran que, una vez ejecutado, Andalucía reducirá durante este año un 60% el número de pacientes fuera de decreto.
Desde la Consejería recalcan que dicho plan se activa tras el aumento de pacientes en espera de una intervención quirúrgica fuera de los plazos de garantía registrado a finales de 2023. «De este modo, si en junio de 2023 había 134.749 pacientes en espera de una cirugía dentro de los procedimientos garantizados y, de estos, 36.004 fuera de los decretos; en diciembre de 2023 esa cifra subía hasta los 142.507 pacientes, de los cuales 53.014 estaban fuera de decreto de garantías», enumeran. Sobre esta cuestión, los datos suponen un acto de fe, ya que en la web oficial solo están colgados los datos de junio de 2023, unas cifras que se aportaron en el mes de noviembre casi un año después del último informe.
Para la Consejería, dicho incremento se debe a cuatro cuestiones. Entre ellas está la «reactivación» de la actividad asistencial tras la pandemia por la Covid-19. Sostienen que en 2022 se realizaron 640.911 consultas más y en 2023, 494.576 más. «Como consecuencia de esto último, se produce un aumento de las indicaciones para procedimientos quirúrgicos», alegan. En 2022 se habría incrementado el número de indicaciones un 9,58%, lo que supuso la inscripción en lista de espera quirúrgica de 38.610 pacientes más que en 2021. En 2023 el incremento respecto a 2022 se situó en el 1,42%, con 6.249 pacientes más.
Además, vuelven a insistir en que otro factor es el «grave déficit» de profesionales sanitarios, que ha provocado que, en áreas concretas, como Anestesiología, al Servicio Andaluz de Salud le resulte «prácticamente imposible» encontrar profesionales para sustituir bajas o periodos de descanso. Cabe recordar que en estos últimos tiempos son ya varias las entidades ligadas al entorno sanitario que recuerdan que una de las principales causas de este déficit es que las condiciones laborales en Andalucía son de las peores de España, y que muchos profesionales se marchan a otras comunidades u otros países.
El último condicionante que para Salud explica este incremento es el cese de los conciertos ordinarios, donde hay espacio para lamentar la herencia recibida. Explican que entre los meses de enero y junio de 2023 finalizaron en Andalucía los conciertos ordinarios en cinco de las ocho provincias: Almería, Cádiz, Huelva, Jaén y Sevilla, lo que ha supuesto en 2023 el descenso de un 40% de la actividad quirúrgica concertada respecto a 2022, lo que significa alrededor de 19.000 intervenciones quirúrgicas menos por conciertos. Concretamente, en 2022 se realizaron 47.544 intervenciones quirúrgicas por conciertos. En 2023, la cifra bajó hasta las 28.497.
«A esta circunstancia se suma además la no disponibilidad presupuestaria para la renovación de conciertos al tener que hacer frente a la deuda que anteriores gobiernos de la Junta de Andalucía contrajeron con los Hospitales Pascual. De este modo, en 2023 la Consejería de Salud y Consumo abonó las mensualidades que faltaban por valor de 96,8 millones de euros. De haberse podido emplear ese dinero en intervenciones quirúrgicas concertadas, se podrían haber operado en Andalucía en el segundo semestre de 2023 a alrededor de 36.400 pacientes, acabando 2023 con un total de 16.616 pacientes fuera de los decretos de garantía», insistieron.
Reorganización
Ante esta situación, desde el 1 de octubre se está llevando a cabo una «reorganización» de la actividad quirúrgica ordinaria en cuatro aspectos claves: monitorizando diariamente los centros hospitalarios públicos para incrementar el rendimiento quirúrgico ordinario y de las horas extra; garantizando una correcta gestión de la «cola», es decir, que se intervenga el paciente con mayor demora; dimensionando las sesiones quirúrgicas por especialidades en función de los pacientes pendientes de cada una de ellas, y reevaluando clínicamente a los pacientes con más días de demora, señalan.
Asimismo, afirman que se están incrementando las horas extra de los profesionales sanitarios, a través de continuidad asistencial y horas extra. Esta afirmación resulta especialmente llamativa, porque hace unos pocos meses, el hospital de referencia en la provincia de Málaga -el Regional- redujo precisamente el capítulo de estas horas extras.
Cabe recordar que aunque vivir en una u otra comunidad autónoma siempre ha sido relevante a la hora de saber cuánto tiempo hay que esperar para poder ser operado en la sanidad pública, esas diferencias entre territorios también son aplicables incluso dentro de la misma provincia, ya que según el hospital que corresponda a cada ciudadano, la situación cambia de forma radical. Ese es el caso de Málaga, provincia en la que los pacientes del Hospital Regional tienen que esperar, de media, más del doble que los del Hospital Clínico.
Ese era uno de los principales datos que se desprendían el pasado mes de noviembre de la publicación de las listas de espera sanitarias de Andalucía, que llegaban con más de seis meses de retraso. El tiempo medio de espera crecía en todos y cada uno de los hospitales malagueños, que no se libraban del empeoramiento de la sanidad pública. Ninguno de ellos registraba menos de 50 días de espera media, al tiempo que el Regional -el peor de lejos de toda la provincia- se convertía en el cuarto con más dilaciones de toda la comunidad autónoma andaluza.
De esta manera, el hospital con una mayor demora era el Regional de Málaga, cuyo retraso medio era en junio de 2023 de 200 días, con 2.325 enfermos fuera de plazo, es decir, que esperan más de lo establecido por la Junta de Andalucía. En total, había 11.907 personas en lista de espera. Esto convertía al centro en el cuarto con peor situación de toda Andalucía, solo superado por el Hospital Universitario de Jaén (media de espera de 226 días), el Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva (224 días) y el Hospital Universitario Torrecárdenas de Almería, con 209 días de espera media. En Sevilla, la provincia más poblada de Andalucía, el centro con más demora era el Hospital Universitario Virgen del Rocío, con 142 días de media.
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