Miguel Ángel Heredia deja a Susana Díaz por Juan Espadas

El paso dado por el actual senador Heredia adquiere una especial relevancia tanto por el hecho de que durante ocho años dirigió el partido en Málaga y contribuyó a aupar a Díaz al liderazgo del PSOE-A como por haber sido uno de los políticos de mayor confianza de ésta llegando a ser uña y carne. Cabe recordar que en 2014, la entonces presidenta de la Junta situó al malagueño como secretario general del grupo socialista en el Congreso de los Diputados, convirtiéndose en los ojos y los oídos de Díaz en Madrid en un momento en que estaba en juego el liderazgo del socialismo en España.

En el Paseo del Salón de la capital granadina, donde Espadas dio el pistoletazo de salida de su carrera para las primarias que se celebrarán el próximo 13 de junio, Heredia estuvo acompañado por Daniel Pérez el otro peso pesado del socialismo malagueño de la línea susanista que hace unos días también abandonó el barco del proyecto político de Díaz y se sumó al de Espadas. Fue una llamada de teléfono del secretario de Organización federal y ministro de Transportes, José Luis Ábalos, el pasado 25 de abril anticipándole que tras las elecciones de Madrid se convocarían las primarias en Andalucía lo que llevó al portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de la capital a tomar la decisión, nada fácil en lo personal y lo política, de abandonar a su aliada y posicionarse junto al alcalde de Sevilla.

Ambos formaron parte de la delegación malagueña, donde figuraron, entre otros los diputados nacionales Ignacio López –miembro de la dirección federal– y Mariló Narváez; el senador José Aurelio Aguilar; los alcaldes José Ortiz (Torremolinos), Jorge Gallardo (Cártama) y Francisco Martínez (Álora); las diputadas provinciales Emilia Mañas y Desirée Cortés; el jefe de gabinete del subdelegado del Gobierno, Salvador Salcedo; la integrante de la Plataforma Feminismo Socialista, Meli Galarza; el concejal de Vélez-Málaga y destacado sanchista José María Domínguez; la exalcaldesas Isabel Aguilera (Ronda) y María del Mar González (Ardales); o los concejales de la capital María del Carmen Sánchez, Lorena Doña, Begoña Medina y Mariano Ruiz Araújo.

El cambio de bando de Heredia y Pérez, que es visto como una traición a los ojos de una parte de la militancia y de algunos de sus compañeros en cargos públicos y orgánicos, es un ejemplo del estado de ebullición y efervescencia en la que ha entrado el socialismo malagueño ante la convocatoria de unas primarias que se prevén enconadas y tensas.

Un ejemplo se vivió hace unos días en la agrupación de Churriana de la capital, donde el secretario general y concejal, Salvador Trujillo, tuvo que escuchar reproches de los afiliados por haber posicionado sin consultarlo a la agrupación –tradicionalmente conocida por su unidad y buena sintonía interna– con Espadas.

En este sentido, fuentes consultadas apuntan a que la dirección provincial mantendrá una posición de neutralidad en el este proceso, aunque cuestión distinta será la postura que adopten individualmente como militantes sus integrantes. El secretario general, José Luis Ruiz Espejo, es una persona muy cercana a Susana Díaz. Como también los es el parlamentario andaluz Francisco Conejo, otrora mano derecha de Heredia y ahora también distanciados.

Asimismo, los afines en Málaga a Díaz están perfilando una plataforma de apoyo a la candidatura de la secretaria general y el germen es un grupo de washap que ya está funcionando con 200 integrantes. En los próximos días se les pondrá rostro a los mismos y se apunta a que serán nuevos perfiles de militantes y cargos que hasta ahora han estado en una segunda línea.