La 'resaca' de Laurence: así están los embalses y cauces de Málaga

Más de 100 litros por metro cuadrado en algunas zonas; vientos fuertes; rescates; desalojos; inundaciones; cortes de carreteras y accesos; riadas... El paso de Laurence por la provincia de Málaga causó estragos, especialmente en el entorno del Guadalhorce y Campanillas. Hasta 11 cauces llegaron a nivel de alerta y los dos citados se desbordaron. Hubo situación crítica en torno a una presa de Casasola que llevaba aliviando desde el sábado y con los desagües de fondo atorados. Se superaron las peores previsiones de lluvia concentrada en poco tiempo. ¿Y cómo está la situación de cauces y embalses el día después de Laurence y a un día de que llegue un nuevo frente, Martinho?

Se podría decir que las aguas han vuelto a su cauce, pero, a primera hora de este miércoles, todavía había dos alertas fluviales. Se trata del Genal a su paso por Jubrique y del Grande, en Las Millanas. Este último lleva prácticamente crecido desde el Día de Andalucía. Pero su falta de regulación mediante presa o gran azud impide aprovechar grandes caudales. Tan sólo lo que fluye al desembocar en el Guadalhorce y pasar por el azud de Aljaima, que gestiona Emasa. Es verdad que estos días la turbidez impide su uso pero, al menos, está recargando acuíferos.

El Guadalhorce, que llegó a alcanzar nivel rojo y su máximo histórico y que se desbordó en Cártama, con gran afección a la zona de Doña Ana, ha salido a las dos de la mañana de la fase amarilla. Todavía fluía a las nueve con un gran caudal, 238 metros cúbicos por segundo, pero fuera de peligro. También bajaba con mucha agua en la citada Aljaima. Se da la circunstancia de que tanta agua ha llegado a unir visualmente el canal principal y los brazos en la zona final antes de la desembocadura.

El Campanillas, pese al alivio de Casasola, que sigue por encima de su nivel de llenado, salió del estado de alerta el martes por la tarde y se mantiene con 6 metros cúbicos por segundo, fuera de peligro. Al igual que otros ríos que han dado problemas en las últimas fechas, como el Guadalhorce en puntos como Archidona, Bobadilla o Paredones; el Turón; el Benamargosa o el Guadiaro.

En cuanto a los embalses, han ganado nada menos que 30 hectómetros cúbicos con el paso de la borrasca. Es el consumo anual de 450.000 habitantes. La curva de entrada ya se ha contenido, con una crecida de unos 2 hm3 esta madrugada.

Almacenan casi 325 hectómetros cúbicos y La Viñuela acaba de pasar a ser el que tiene más agua de la provincia, con 67. Supera ya a un Conde de Guadalhorce a rebosar, con 66. El Guadalteba tiene 60 y La Concepción supera los 50, pero sigue desaguando. La crecida sería muy superior de no ser por los desembalses en las citadas Casasola y Concepción, en el Conde y desde el Tajo de la Encantada.

Casasola, en Almogía, que ayer marcó su tope histórico, por encima de los 25 hm3 (supuestamente está diseñado para 21,72), ha amanecido este miércoles al 102% de su volumen. Sigue bajando de nivel.

El Guadalhorce sigue con su aumento contenido y llega a los 43 hm3, en tanto que el Limonero, en el Guadalmedina, supera los 14, más del doble de lo que suele registrar.

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