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Suele ocurrir cada año cuando se presentan los presupuestos anuales del Gobierno central o de la Junta que cada partido analiza las cuentas con las ... gafas de si su partido está en el poder o en la oposición. Ha vuelto a ocurrir este lunes cuando el PSOE e IU han sacado pecho de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023 en Málaga y para ello se han aferrado no a la inversión en infraestructuras -que baja y se queda en los 227 millones- sino al gasto social que recogen unas cuentas que han situado, como denuncia la oposición del PP, a la provincia en el antepenúltimo lugar en inversión por habitante en cuanto a infraestructuras, sólo por delante de Jaén y Alicante.
Daniel Pérez, secretario general del PSOE en Málaga, y Guzmán Ahumada, coordinador provincial de IU (uno de los partidos que integran Unidas Podemos en el Gobierno de coalición) han coincidido esta mañana en catalogar los presupuestos como «los más sociales de la historia» y «centrados en la gente por el aumento en la inversión social».
En el barrio de la Cruz del Humilladero, donde se ha reunido con la interparlamentaria socialista (diputados, senadores y parlamentarios autonómicos), Pérez ha sostenido que estas cuentas dan «una respuesta necesaria y coherente con la situación que hay» y que la partida destinada a la provincia en inversión es «casi el doble de lo que Rajoy invirtió en 2018».
El líder socialista esgrimió que Málaga tiene sus grandes infraestructuras ya construidas, que los pensionistas tendrán una subida del 8,5% que supondrá un incremento medio de 100 euros y unos 200 millones de euros más que van a recibir «gracias al Gobierno de Pedro Sánchez», que la partida para dependencia sube en 67%, crecen las aportaciones en materia de sanidad y en educación con las becas que beneficiarán a 90.000 estudiantes, se establecen los 250 euros al mes para alquiler de viviendas para los jóvenes, el bono cultural de 400 euros o la bonificación en el tren de media distancia, autobús y metro que beneficiará a 45.000 usuarios malagueños.
«Estos son los presupuestos de la gente, son los presupuestos que los vecinos van a poder comprobar frente a unos efectos tan adversos como es la subida en esta caso es la inflación», ha enfatizado.
En esa línea, Guzmán Ahumada ha afirmado que los PGE son unas cuentas «centradas en la gente y en dar salida a los problemas de las familias, los trabajadores, las pymes y los autónomos malagueños en el actual contexto de crisis» y ha enumerado que beneficiará a los pensionistas con el incremento mensual de su pensión, a los 45.000 malagueños que tendrán una subida del ingreso mínimo vital, a los 135.000 residentes en la provincia que verán reducido el IRPF al percibir menos de 21.000 euros al año o la partidas destinadas a los autónomos y a las empresas para reducir el impuesto de sociedades.
«A diferencia de la tijera y los recortes a los servicios públicos de los gobiernos del PP durante la pasada crisis, con el gobierno de coalición, la inversión social ha aumentado en un 35% de forma global. Si lo desglosamos supone un 30% más para sanidad, un 150% para dependencia, un 60% para las becas a estudiantes y contamos con hasta siete veces más recursos para realizar políticas de igualdad. Todos estos avancen tienen reflejo en la provincia de Málaga», ha subrayado Ahumada.
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