El proyecto del tren a Marbella prevé conectar el aeropuerto con alta velocidad

Esta solución está incluida en el reciente estudio del tren de la Costa, que ha elaborado la consultora ARCS por encargo de Unicaja y que fue presentado la semana pasada con el apoyo del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; y el presidente de la Diputación, Francisco Salado.

De hacerse realidad, esa conexión, que ya se planteó cuando se construyó la actual Línea de Alta Velocidad (LAV), permitiría que cualquier ciudadano de Sevilla pudiera tomar un vuelo internacional tras un trayecto de una hora y 35 (cuando esté operativo el baipás de Almodóvar del Río). Uno de Granada, en una hora y 20 minutos. De Córdoba, en una hora, y Antequera, en sólo 30 minutos. Esto supone alcanzar un área de influencia de unos cinco millones de habitantes (similar a la que tiene Barcelona).

Pero el flujo también sería inverso, de los turistas internacionales que aterrizarían aquí y podrían salir directamente a conocer las grandes urbes culturales del interior de Andalucía, sin tener que hacer escala en la estación María Zambrano.

A nivel técnico, se plantean dos posibles soluciones: un complejo ramal, subterráneo en la mitad de su recorrido, de unos siete kilómetros desde la línea actual en el acceso a la capital malagueña (con un coste de unos 200 millones de euros). Pero también cabe la posibilidad de acometer un baipás de aproximadamente un kilómetro en Los Prados (parecido al que se está haciendo en Almodóvar), unido a varias remodelaciones en la plataforma del Cercanías y en la estación del polígono Guadalhorce. El coste sería de unos 30 millones.

Cabe recordar que desde la UE se está impulsando que los principales aeropuertos europeos, como infraestructuras estratégicas (entre los que está el de la Costa del Sol), estén conectados a la red de alta velocidad, y de hecho, en el caso de Madrid-Barajas las obras ya están en marcha.

El de Málaga fue el primer aeródromo que tuvo conexión con el ferrocarril de España, en 1975; y actualmente sigue teniendo una parada subterránea de la línea C1 de Cercanías con una afluencia muy importante de pasajeros.

En cualquier caso, esta propuesta forma parte de un conjunto, dentro del estudio para llevar las vías del ferrocarril hasta Marbella, en el que los trenes de Media Distancia podrían seguir camino desde las citadas urbes hasta la Costa del Sol, y viceversa. Esto es, la plena conexión de este espacio de oportunidad con la mayor parte de Andalucía, con una previsión de 40 millones de viajeros al año (sería la tercera con mayor intensidad de demanda, por detrás de Madrid y Barcelona).

Por tanto, la posibilidad de desarrollar el ramal de manera aislada del resto de la intervención costera no se considera factible, dado que habría que acometer una estación terminal de ancho UIC (aparte de la del Cercanías) en el aeropuerto, junto a otras obras complejas, de acuerdo con las fuentes técnicas consultadas por SUR. «Llegar al aeropuerto, de por sí, no tiene sentido funcional ni técnico; tiene que ser una estación de paso, como ocurre en el resto de capitales europeas donde ya lo tienen, pero no una estación término», explica uno de los ingenieros consultados.

Por tanto, la conexión de alta velocidad con el aeropuerto se considera un eslabón dentro de la cadena completa, que sería la nueva línea de ancho UIC a lo largo de la Costa, y que partirá, precisamente, de este enclave estratégico y central de la actividad económica de la provincia.

El estudio ha sido redactado por ARCS, la consultora que dirige el reconocido ingeniero José Alba, con el patrocinio de Unicaja y la colaboración de Analistas Económicos de Andalucía. Lo que propone es, básicamente, una línea de ancho UIC, apta para velocidades de hasta 160 kilómetros por hora, por donde podrían circular trenes de larga distancia y de Cercanías, y con un trazado 100% nuevo desde el aeropuerto hasta Marbella.

Por tanto, coexistiría con la C1 a Fuengirola. Tendría pocas paradas enlazadas con autobuses y con bolsas de aparcamiento. Y discurriría en subterráneo en 41 de los 46,6 kilómetros totales, en paralelo al recorrido de la A-7, próximo a los núcleos urbanos.

La mayor parte de la traza sería un túnel, concretamente el 88%. Allí donde se aleja algo más de la A-7 sería perforado (con tuneladora) y en doble tubo. Y en los tramos próximos a la margen norte de la A-7 se emplearían los muros-pantalla (como en el metro de Málaga), aunque ese nivel de detalle lo tendrá que determinar el proyecto. El coste estimado: 2.700 millones de euros.

En cuanto a las estimaciones de demanda, el informe calcula que en el horizonte de 2032 lo utilizarían entre 34 y 46 millones de viajeros al año. Sería, por tanto, la tercera línea de España con más pasajeros, sólo por detrás de Madrid y Barcelona.

Sobre los tiempos de trayecto, desde el aeropuerto a Marbella, sin paradas, se podría cubrir en sólo 22 minutos, y en 55 con las paradas previstas. Pero, como se ha visto, también serían posibles los trayectos desde la capital española, Sevilla, Córdoba, Granada, Antequera, etc.

En el escenario actual, una vez que se ha presentado el estudio en sociedad, el siguiente paso es tratar de crear un frente común, donde los ayuntamientos implicados y la Diputación Provincial se pongan de acuerdo en las líneas maestras de la propuesta, e implicar también a la Junta. El siguiente paso será llevarlo a Madrid, para que el Ministerio de Transportes lo tome en consideración, dentro de sus planes de impulso y de inversión presupuestaria.