Proyectan un centro ambiental de reciclaje y vertedero al norte del Puerto de la Torre

'Complejo Ambiental Málaga Norte' es el nombre empresarial de un gran proyecto relacionado con el tratamiento, el reciclaje y la valorización de residuos que se abre paso administrativo liderado por Verosa, compañía de larga trayectoria con divisiones de obra civil, movimientos de tierras o minería. Pura economía circular e incluso colaboración público-privada porque uno de sus cometidos fuertes está enfocado al reciclaje de materiales de obras, aunque no sólo. Se trata de una actuación al norte del Puerto de la Torre, muy cerca de la autopista de peaje AP-46. Son tres parcelas que suman una superficie equivalente a unos 40 campos de fútbol.

Ahora mismo, el proyecto, del que sus impulsores destacan el factor sostenibilidad, está en fase de obtención de la autorización ambiental unificada, para lo que la Consejería de Sostenibilidad de la Junta ha abierto un plazo de alegaciones.

Está redactado por Galain Ingeniería y abarca un completo análisis de suelos, emisiones, fases de obra, controles, accesos, geología, agua, ruido, opciones de negocio e, incluso, arqueología. El documento técnico, redactado con profusión, contempla todo el proceso desde la fase de diseño y obras, a la de explotación, clausura y restauración.

Urbanísticamente, se trata del polígono 32 y las parcelas son la 658, 659 y 660. El perímetro quedará cerrado para evitar accesos no autorizados. Entre los residuos, siempre no peligrosos, que se podrán tratar, reutilizar o transferir, según el caso, se encuentra un largo listado de productos: hormigón, ladrillos, tejas, tierra y piedras, algunas mezclas bituminosas, serrín, virutas, tejidos vegetales, madera, envases de plástico y metálicos, cobre, bronce, latón, ropa, vidrio o grandes aparatos domésticos.

Por poner la superficie del proyecto en contexto, el futuro centro ambiental ocupará unas ocho veces menos que Los Ruices (Limasam) y ligeramente menor que el complejo de Valsequillo, del Consorcio Provincial, que la Diputación tiene en Antequera. Hay otro privado de algo menos doble en Cerralba (Recicla Andalucía).

«La sociedad peticionaria proviene de un grupo empresarial con larga trayectoria profesional, con más de 20 años de experiencia en el sector de la obra civil, edificación y movimientos de tierra. Existe una problemática en el municipio de Málaga y es que únicamente se cuenta con un centro ambiental de gestión de residuos no peligrosos con vertedero autorizado, destinado específicamente a los residuos de origen municipal, ya que en la mayoría de los casos estas instalaciones, existentes en la provincia de Málaga, son de residuos inertes [no reaccionan químicamente con el medio]», se recoge en el inicio del citado proyecto, que ha sido consultado por SUR.

¿Qué se quiere hacer? Un centro de gestión de residuos no peligrosos, en el que se realizará la valorización (segunda vida en formato similar o bien distinto) para residuos pétreos, de madera y poda… Y, con eso, se obtendrían productos tales como áridos reciclados, tierras, biomasa y compost vegetal. Del mismo modo, se contemplan tratamientos intermedios tales como la clasificación y trituración de residuos voluminosos, así como compactado de plástico y papel-cartón, entre otros. Además, este centro recibirá, siempre y cuando su entrega sea ordenada por autoridades públicas en situaciones de fuerza mayor, extrema necesidad o catástrofe, decomisos de bienes a destruir y residuos cuya obligación legal sea la eliminación u otros.

A efectos de verificar la compatibilidad urbanística del suelo de actuación para la actividad proyectada, se ha tramitado el proyecto también en el Ayuntamiento de Málaga. Se han desarrollado profundos trabajos previos con diferentes administraciones. De hecho, se quiere trazar una glorieta en el kilómetro 8,7 de la carretera A-7075 (Málaga-Almogía-Antequera), que ya ha obtenido un primer visto bueno autonómico.

La superficie total es de 403.022 metros cuadrados. En su interior se establecerán diferentes áreas para la gestión de los residuos. Se ejecutarán terraplenados y excavaciones, caminos de circulación y construcciones que permitan el satisfactorio funcionamiento de la actividad. La ubicación, según recoge el documento, es adecuada para esta actividad, ya que se encuentra alejada de los núcleos de población más cercanos pero, al mismo tiempo lo suficientemente bien conectada. Se accedería desde la autovía A-7, por la salida 989 siguiendo por la citada A-7075 durante 3,7 kilómetros, en dirección Puerto de la Torre/Almogía (hasta el kilómetro 8,2).

La parcelas contarán, además de con infraestructuras operativas e instalaciones mecanizadas, con oficinas, nave industrial, etc. El vertedero en sí ocupará 67.765 m2. Será ejecutado en hasta 5 fases verticales. La primera llegará a los 111.700 metros cúbicos de capacidad y se llegará 1,85 millones de metros cúbicos al final. Se le estima una vida útil de 25 años.

En total, se espera dar una segunda vida a 315.476 toneladas al año con porcentajes de recuperación que rondan el 90%, según el caso.

La inversión ya ronda los 5,5 millones de euros teniendo en cuenta infraestructura, obra civil, maquinaria... Los suelos son propiedad de la compañía promotora, que prevé una creación de 15 puestos de trabajo directos.

Es el primer proyecto ambiental de estas características en la ciudad y es fruto de un trabajo de cuatro años ya. Fuentes de la empresa destacan que se trata de dar un servicio a Málaga capital y a sus crecimientos proyectados, sobre todo por la gran cantidad de residuos procedentes de la construcción a los que se puede dar una segunda vida y cuya gestión pública ofrece ciertas complicaciones.

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