Se prevé para marzo llegar a los 40.000 pisos turísticos en la Costa del Sol

Y es que al compás de este primer informe que radiografía la oferta, la Junta ha avanzado también un estudio pionero sobre la demanda del alquiler vacacional, una actividad que hasta ahora escapaba del análisis estadístico al que mensualmente están sometidos desde los camping, hasta los hoteles o las casas rurales. Pues bien, tras este primer paso, el consejero de Turismo, Justicia, Regeneración y Administración Local, Juan Marín, ha anunciado que, a partir de ahora, periódicamente se dará cuenta del movimiento de turistas, de su estancia media o la nacionalidad de quienes eligen las viviendas turísticas en la región. «Nuestra intención con este primer estudio es disponer de una imagen descriptiva de estos usuarios, y tenemos intención de realizar una estadística periódica que nos mantenga permanentemente informados», asegura, para reconocer que se trata de una primera aproximación a los datos de demanda de estos alojamientos, pero muy interesante, especialmente para el sector hotelero porque les puede ayudar a elaborar sus estrategias con mayor precisión.

Los primeros datos cifran en 4,4 millones los turistas que el pasado eligieron las viviendas turísticas durante sus vacaciones en Andalucía, lo que supone el 14% del total de turistas que recibió la región en el pasado año, según este estudio, del Sistema de Análisis y Estadística del Turismo de Andalucía (SAETA). Y es que partiendo de los datos de la Encuesta de Coyuntura Turística de Andalucía, se detecta que se trata de un turista más joven, ya que el 30% tienen menos de 30 años y solo el 10% más de 65, cuando en el caso de los alojamientos hoteleros ambas franjas de edad rondan una cuota del 20%.

Las familias son el grupo con una mayor representatividad en esta tipología, con un 40% del total de clientes alojados. Por su parte, los viajeros con niños suman el 20% de los turistas en hoteles, mientras que las parejas acaparan una cuota de alrededor del 60%.

En cuanto a la procedencia del turistas, el mercado nacional tiene mayor peso, cerca del 60% en el caso de las viviendas frente al 52% en hoteles; y se muestra una elevada estacionalidad, con una concentración en el tercer trimestre de casi el 40%. La estancia media en el destino casi se duplica, con 10,2 días frente a 5,7 en hoteles, pero el gasto medio diario es más reducido en los clientes de pisos turísticos, concretamente de 60 euros frente a 69. Si bien los ingresos que dejan en el destino son mayores que los de los hoteles porque están en el mismo casi el doble de tiempo. Cabe recordar que las plazas en viviendas turísticas de la comunidad suponen en torno al 32% del total de la oferta de alojamientos de Andalucía. La mayor parte se concentra en la provincia de Málaga, con el 58%, y Cádiz, con un 13%, acaparando el litoral de la región un 80% de la capacidad alojativa.

En cuanto al perfil del viajero también se caracteriza por un alto grado de organización particular, que asciende al 94%, mientras que en los turistas hoteleros supone el 71%; así como por dedicar más tiempo a compras, disfrute de la playa, deportes o naturaleza.