El instituto Martín Rivero de Ronda, cantera de futuros investigadores

El premio más reciente lo han recogido este mismo miércoles, de manos de la ministra de Educación y FP, Pilar Alegría. Ha sido en el concurso Redes Steam, que desafía a alumnas de tercer curso de Secundaria a crear proyectos tecnológicos y científicos que contribuyan a un mundo más sostenible social y ambientalmente. El objetivo del certamen es fomentar entre las jóvenes de 14 y 15 años el estudio de las disciplinas Steam, esto es, de la Ciencia, la Tecnología, la Ingeniería y las Matemáticas en conexión con las Artes y Humanidades.

Las alumnas Clara Fernández, Claudia García, Alba Guerrero, Sophie Isabel Higgins y Paula Flores, asesoradas por su profesor Marcos Naz, han presentado el proyecto titulado 'El ave Fénix del incendio de Sierra Bermeja', uno de los ganadores en el certamen. En la tarde de este miércoles ha tenido lugar el acto de entrega de los premios, que ha estado presidido por la ministra de Educación, Pilar Alegría. Las alumnas, explica su profesor, han ideado un proyecto para recuperar el suelo quemado en el incendio forestal de septiembre pasado en Sierra Bermeja. Consiste en un dispositivo de captura de agua de lluvia y de regado autónomo que permite estabilizar el suelo quemado gracias a un diseño que imita las raíces de los árboles y su función, manteniendo así la tierra unida y ayudando a recuperar su calidad. A su vez, para la mejora de la filtración el agua en el terreno, han propuesto un fertilizante casero a base de cáscara de caracol que le añade calcio al suelo de fácil absorción.

Acostumbrados a recoger premios, el profesor Marcos Naz señalaba que para todo el grupo el acto de este miércoles ha sido muy especial, pues solo se han entregado seis premios a nivel nacional, y uno de ellos ha sido para el Martín Rivero. Además, se trata de un concurso solo para chicas, por lo que el premio tiene más mérito en unas disciplinas en las que hay poca presencia femenina. «A todos nos ha ilusionado mucho este premio», ha señalado el profesor.

Por otra parte, el instituto ha participado en la XXIII edición del concurso Ciencia en Acción con diez proyectos y ha conseguido cinco primeros premios, además de dos menciones de honor. También el profesor Marcos Naz ha sido reconocido con la medalla de honor de Ciencia en Acción, que se concede por su carrera en estos últimos años de concurso. El certamen se ha celebrado a principios de este mes en la localidad de Viladecans (Barcelona).

Los proyectos galardonados con un primer premio han sido, en la modalidad Steam, 'Estudio para la determinación de la transferencia de calor en aluminio y hojalata bajo los efectos de un nuevo proceso de 'grafenización', realizado a partir de un método casero para la obtención de grafeno'; en la modalidad laboratorio de Geología; 'Estudio de la eficacia del polvo de serpentinita como reductor de daños en terremotos'; y en la modalidad sostenibilidad, 'El ave Fénix del incendio de Sierra Bermeja: El 3PET-RICALL' .

Premiados con una mención de honor han sido, en la modalidad Steam, 'Smogbuschool' y en la modalidad sostenibilidad, 'La marcha de los pinsapos', que ha contado con la ayuda en la tutorización del profesor Francisco Benarque. En el primero, los alumnos analizaron la contaminación que producen los autobuses escolares que tienen el motor encendido mientras suben los estudiantes. Fruto de su trabajo es que ahora los autobuses tienen los motores apagados hasta que no están todos los alumnos dentro. En el segundo, han analizado con fotografías aéreas y comprobado el desplazamiento hacia altitudes superiores de los pinsapos como consecuencia del cambio climático.

Otros premios que también han sido finalistas en otras categorías han sido 'Arqueoacústica', 'Mask-Converter', 'Aerogeneradores Coanda', 'El mito de la belleza' y 'La capacidad regeneradora de la Cueva del Gato'.

El profesor Marcos Naz asegura que el instituto Martín Rivero «está poniendo a Málaga en lo más alto de los concursos de investigación escolar». El centro, explica el profesor de Física y Química, trabaja el concepto de investigación y desarrollo desde primero de Secundaria. «Formamos cada curso a unos 200 estudiantes que van pasando por los distintos niveles hasta terminar Bachillerato». Una preparación de la que da cuenta, por ejemplo, el reciente premio a uno de sus alumnos, Daniel Guerrero, en el certamen nacional de jóvenes investigadores del Ministerio de Universidades.

El profesor Naz valora que son los propios alumnos los que proponen los temas a investigar, en muchas ocasiones a partir de sus propias experiencias y preocupaciones, desarrollan el trabajo y llegan a unas conclusiones, utilizando el métido científico. Es además, destaca el docente, una metodología transversal, que implica a todos los alumnos y a los diferentes bachilleratos. «Aquí se investiga en todas las áreas de conocimiento», afirma Marcos Naz.

«Han sabido trabajar en equipo para poder estar a tiempo en un evento a más de 14 horas en autobús, enseñados a no solo realizar el trabajo de investigación finalista, sino a montarlo por sí mismos y convencer a un jurado profesional que está realizado con el máximo rigor científico y presentado de una manera amena y divertida utilizando en algunos de los proyectos herramientas de los nuevos programas STEAM que la Junta de Andalucía está proporcionando a los centros educativos», comenta el docente.