Málaga es la segunda capital en la que más cuesta alquilar, pero ¿destinan menos quienes compran?

Pero que la tasa de esfuerzo que requiere en Málaga el pago del alquiler sea tan elevada no significa que las rentas en esta capital sean más caras que en el resto de capitales de España. De hecho, Málaga ocupa apenas la sexta posición en el ránking de alquileres más cuantiosos, con sus 12,8 euros por metro cuadrado y mes. Por encima se encuentran Barcelona (19,4 euros), Madrid (17,4 euros), San Sebastián (17 euros), Palma (14,7) y Bilbao (13,1).

Lo que pone de relieve esta elevada tasa de esfuerzo es que los precios de los alquileres en Málaga son muy altos en comparación con la renta disponible media en Málaga: ello lleva a la capital a ser la segunda de todo el país en la que más esfuerzo financiero requiere alquilar una vivienda.

Si bien Málaga está relativamente lejos de los precios de alquiler más caros de España, la velocidad a la que están subiendo las rentas es muy elevada. En el último año, de acuerdo con un informe publicado este jueves por la consultora Colliers, los arrendamientos han subido un 17,4%. Esta cifra, de entre las capitales con los alquileres más caros, sólo la rebasan Palma, donde el encarecimiento ha sido de un 17,6%, y Alicante (23,3%).

En el mercado de compraventa, Málaga retrocede hasta la quinta posición en términos de esfuerzo: hacer frente a la adquisición de una vivienda en la capital malagueña implica destinar a este fin -al pago de la letra mensual- un 35,6% de la renta neta disponible, una cifra que está levemente por encima de los niveles recomendables por los organismos internacionalesn -que rondan el 35%-. Para la estimación del esfuerzo hipotecario Colliers ha tomado el coste de una hipoteca de un piso de 75 metros cuadrados y la renta disponible de un hogar medio en cada capital de provincia, así como un préstamo equivalente al 80% del valor de la vivienda y los tipos de interés medios actuales, además de un plazo de amortización de 25 años.

El esfuerzo para la compra de una vivienda es muy superior en San Sebastián, donde la cuota hipotecaria se lleva cerca de la mitad de la renta media disponible por el hogar. También en Palma, donde el pago de la hipoteca supone casi un 44% de los ingresos, mientras que en Barcelona ronda el 42,5%. Mientras, en Madrid, la cuarta capital en la que más esfuerzo implica la compra de una vivienda, hacer frente a la letra mensual supone desprenderse de casi un 39% de los ingresos.

En Málaga, el precio medio de las viviendas nuevas que se venden asciende a los 308.000 euros, lo que supone una subida del 12,4% interanual. Esa cifra convierte a la capital malagueña en la sexta en la que más caras son las viviendas que se transaccionan, por detrás de San Sebastián (533.000 euros), Barcelona, Madrid, Palma y Pamplona. En cuanto a las casas de segunda mano que se venden, las de Málaga, de media, cuestan 206.000 euros, cifra que apenas es un 1,33% más alta que hace un año y que coloca a la ciudad en el octavo puesto del ránking de ciudades más caras, por detrás de las tres capitales vascas, Madrid, Palma, Barcelona y Pamplona.

Málaga tiene el noveno precio por metro cuadrado más caro de España en compraventa de segunda mano (2.190 euros) y el quinto en vivienda nueva (2.820 euros).