Pedro Navarro: «Los pediatras podemos diagnosticar problemas con el móvil, pero sin psiquiatras infantiles es un brindis al sol»

A esta ley le quedan todavía bastantes meses para convertirse en una realidad. Tras su primer paso por el Consejo de Ministros, el anteproyecto tendrá que ser informado por los órganos consultivos del Gobierno antes de llegar al Parlamento para su tramitación y aprobación. En la elaboración de este primer borrador han participado los ministerios de Juventud, Transición Digital y Presidencia y Justicia. Sin embargo, mientras esto ocurre ya hay algunos elementos que han llamado la atención.

Una de estas medidas afecta directamente a la salud, lo que conduce a los sanitarios y pediatras. En concreto, se avanza que el programa que los pediatras y enfermeras de los centros de salud usan para prevenir y detectar dolencias y conductas o hábitos perniciosos en la infancia y la adolescencia incorporará a sus test habituales preguntas que permitan identificar de forma precoz indicios de uso problemático (o incluso la adicción) a las pantallas o a internet, para proporcionarle ayuda especializada. Su puesta en marcha y el diseño de protocolos se realizará en coordinación con las autonomías, que son las prestadoras de la atención sanitaria. Los centros especializados han detectado un aumento de adicciones tecnológicas en adolescentes, sobre todo entre ellos. Las de los chicos suelen ser los videojuegos y las de ellas, las redes sociales.

Preguntado por esta medida, el presidente del Colegio de Médicos de Málaga -y además pediatra de profesión-, Pedro Navarro, recalca a SUR que ésta es una «muy buena medida». «Los pediatras hace tiempo que, además de preguntar por la alimentación, el sueño o la protección solar, también lo hacemos por el uso del móvil. Cuando tengo más confianza hablo del control del niño ante las páginas web que visita. Es una medida razonable, se tiene que controlar el uso», recalca el facultativo.

Eso sí, el también presidente del Colegio de Médicos de Málaga recuerda que no pueden ser solo intenciones, y que a esta medida hay que dotarla de recursos porque el pediatra tiene un tiempo finito, sobre todo en la atención primaria. «Tiene que ser como una consulta de niños sanos. Quieren -y lo veo bien- instaurar un protocolo, y eso requiere de recursos para que se pueda ejecutar», explica.

Salud mental

Cuando habla de recursos, el pediatra señala al mismo lugar al que se lleva señalando en los últimos años sin que haya una respuesta efectiva: «Estos niños, cuando son diagnosticados, hay que llevarlos a una esfera superior como la salud mental, pero ahora mismo no hay psiquiatras infantiles, es a esto a lo que me refiero. Y debe tratarlos rápido, no que esperen durante meses», incide. Navarro recuerda que son terapias que tardan, por eso toda esta batería de medidas podría terminar siendo un brindis al sol. «Que se pueda ejecutar de una forma clara, no que se encargue más trabajo a los profesionales».

A juicio del doctor Navarro, los niños cada vez socializan menos. «Están mucho en las redes, en juegos… además de los problemas que esto causa a nivel visual, están los trastornos del sueño», asegura el facultativo, que separa este problema de otro que también está en el debate público. «Ahí está también el control de los padres sobre las páginas que visitan sus hijos. Ya no solo la pornografía, sino también el maltrato a mujeres, actitudes sexuales impropias de la edad… hay que cambiar el código penal para todas estas cuestiones, como por ejemplo legislar el alejamiento online. Pero insisto, para todo esto hacen falta recursos. Sin ellos no parece que se puedan realizar estas acciones, que son muy positivas».

Pedro Navarro recuerda que los profesionales médicos llevan mucho tiempo pidiendo medidas como estas. «Nosotros siempre preguntamos este tipo de cuestiones, pero no hay que olvidar que al final los niños hacen lo que ven: si los padres están todo el día con una pantalla delante, ellos replican».