Andalucía presiona al Gobierno con una declaración unánime del Parlamento a favor del tren litoral

El posicionamiento adoptado por la Cámara con el respaldo de los cinco grupos que la componen -PP, PSOE, Vox, Por Andalucía y Adelante- supone el máximo respaldo institucional posible en el camino de conseguir que la aspiración de una conexión ferroviaria entre Málaga y Algeciras sea considerada una prioridad y pase a formar parte de la agenda política y de las infraestructuras fundamentales pendientes de ejecutar.

En concreto, con el texto aprobado el Parlamento insta a reclamar al Gobierno de España que haga públicos de manera inaplazable el contenido y los avances de los estudios e informes de esta infraestructura ferroviaria, incorpore esos estudios, con la correspondiente dotación presupuestaria, a la planificación de la conexión ferroviaria del Mediterráneo andaluz, cuente con las diferentes administraciones y agentes sociales y económicos afectados en el proceso de decisión del trazado y suspenda el cobro del peaje de la AP-7. En este último punto, el PSOE se abstuvo.

El parlamentario por Málaga José Ramón Carmona, que defendió la propuesta ante la Cámara en un debate al que asistieron los alcaldes y alcaldesas de todos los municipios implicados, subrayó que esa presencia suponía el testimonio del apoyo con el que cuenta el proyecto. «Hemos conseguido abrir un importante debate social en la opinión pública de la provincia de Málaga y nos sentimos absolutamente respaldados», celebró.

El texto aprobado subraya que no existe en España un territorio similar a la conurbación de Málaga y la Costa del Sol, ya que el sistema de ciudades comprendido entre Nerja y Manilva se comporta como una unidad funcional en muchos aspectos a través de sus 170 kilómetros de litoral y se configura como el tercer gran eje urbano de España tras Madrid y Barcelona.

En ese sentido, Carmona advirtió de que con el crecimiento de la población previsto en los próximos años la movilidad supone un problema que se agravará, por lo que es necesario darle solución. El diputado señaló que los pronósticos vaticinan que en 2030 más de dos millones de personas vivirán en la provincia de Málaga, que superará a Sevilla en número de habitantes y deberá afrontar un serio problema de movilidad sobre el que pidió que todas las administraciones tomen conciencia.

El parlamentario hizo un repaso a todos los proyectos que se fueron poniendo sucesivamente sobre la mesa desde que en 1862 se propuso por primera vez conectar mediante ferrocarril las ciudades de Málaga y Algeciras y destacó que su concreción es imprescindible para el desarrollo de la provincia.

Pese al consenso alcanzado en la redacción final, el debate no estuvo ausente de reproches mutuos. El socialista José Luis Ruiz Espejo aseguró que durante sus años en el Gobierno de España el PP no mostró interés alguno en este proyecto y ralentizó las infraestructuras ferroviaria, al tiempo que criticó que la proposición presentada no incluyera ninguna medida de competencia de la Junta de Andalucía.

Tras admitir que ambos partidos han tenido responsabilidades en materia ferroviaria, advirtió de que si este proyecto se sigue utilizando en la refriega política quedará en vía muerta y reclamó como primer paso que se alcance un consenso sobre qué modelo de tren es necesario para la zona. «Hay que poner el interés general por delante del partidista, porque cuando gobernaron no demostraron este interés» afirmó.

Los socialistas presentaron dos enmiendas -referidas a la conformación de un consorcio compuesto por representantes del Gobierno de España, andaluz y agentes económicos y sociales vinculados a este proyecto y a la puesta en marcha un plan de gratuidad del uso del transporte público interurbano entre todos los municipios afectados- que no fueron admitidas.

Alejandro Hernández, de Vox, dijo que la moción se quedaba corta y defendió las enmiendas presentadas por su partido, que pedían priorizar las obras pendientes en la red viaria de la Costa del Sol. Seis de estas propuestas sí fueron admitidas.

Por su parte, tanto Por Andalucía como Adelante criticaron el modelo turístico y urbanístico de la Costa del Sol y reclamaron a la Junta que cumpla un acuerdo ya adoptado por el pleno y reclame para Andalucía las competencias en ferrocarril.