Los malagueños llenan las gasolineras para apurar la ayuda de los 20 céntimos

Elena Benítez aún tiene medio depósito lleno de su Ford Fiesta, lo que le permitiría recorrer cerca de 300 kilómetros antes de tener que pasar de nuevo por el surtidor. Teniendo en cuenta el uso habitual que hace de su vehículo, tendría combustible para casi un mes. Pero ayer acudió a la gasolinera más cercana a su casa, en la zona de El Cónsul, para llenar el tanque antes de que mañana deje de aplicarse la ayuda de 20 céntimos que el Gobierno concede a todos los conductores desde el pasado 1 de abril.

Como ella, cientos de malagueños llenaron ayer las gasolineras de la provincia para beneficiarse de las últimas ayudas que se van a entregar de forma generalizada. A partir del 1 de enero, dicho descuento decaerá en la factura y sólo podrán beneficiarse de él los transportistas. En concreto, camiones, taxis y autobuses seguirán disfrutando de 20 céntimos por litro durante el primer trimestre del año, y 10 céntimos en el segundo. Se estima que dicha medida tenga un coste de 107 millones de euros, frente a los más de 4.000 millones que ha supuesto este año la bonificación a todos los ciudadanos.

Aunque las estaciones de servicio se han llenado de conductores desde que se anunció el cambio, la jornada de ayer fue especialmente intensa en la provincia. Y se espera que hoy siga el mismo ritmo. Así lo cree Álvaro Fontes, presidente de la Agrupación Andaluza de Vendedores al por menor de Carburantes y Combustibles. «Algunos casi van a celebrar el fin de año en las gasolineras», apunta de forma jocosa.

Este profesional reconoce que desde hace dos días están notando un mayor consumo, que deriva en colas de vehículos en momentos puntuales. «Si el cambio se hubiera anunciado un poco antes, los conductores podrían haber escalonado un poco más la visita», apunta. Aunque sin entrar a valorar la medida, entiende que es positivo que se siga apoyando al menos a los transportistas.

El fin de la ayuda a los combustibles llega en un momento con los precios a la baja. El litro de gasolina se ha situado esta semana en los 1,565 euros, tras retroceder un 1,57% con respecto a la anterior, mientras que el del gasoil se ubica en los 1,643 euros, un 1,08% menos en relación con los siete días anteriores. De este modo, la gasolina encadena su sexta semana consecutiva de descensos y recupera niveles similares a los de antes de la invasión rusa de Ucrania (que comenzó el 24 de febrero de 2022), dado que en la semana del 7 de febrero el precio promedio de este combustible en España se situaba en 1,559 euros el litro. El diésel, por su parte, ha bajado por novena semana seguida, por lo que encadena descensos desde finales del pasado octubre.

Cuestionado sobre el precio del combustible, Álvaro Fontes asegura desconocer la evolución que seguirán a lo largo de las próximas semanas, ya que ellos no intervienen en dicho proceso, sino que sólo se encargan de poner el producto a disposición de los conductores. No obstante, valora de forma positiva que las grandes petroleras hayan anunciado que mantendrán los descuentos para fidelizar a los clientes. «Todo lo que sea un descuento será una buena noticia».

En la misma gasolinera donde reposta Elena Benítez también lo hace Macarena Gil. Ella sí ha apurado más y casi tiene que llenar el depósito completo (66,25 euros de diésel). «Ha sido muy positivo mientras ha durado, pero todo lo bueno se acaba», lamenta. Ella, que usa el coche todos los días para ir al trabajo, cree que esta ayuda también se debería extender para las personas que utilizan el coche durante la jornada laboral. «Seguro que hay fórmulas para lograr que no nos cueste más dinero ir a trabajar; al menos para quienes no podemos desplazarnos en transporte público por falta de alternativas», razona.

Más agradecido se muestra José Jiménez, vecino de la zona que utiliza el coche tres veces a la semana para acudir a Marbella por trabajo. «Aunque me vaya a costar más, creo que es mejor que esa ayuda se dedique a la alimentación, porque comer lo tenemos que hacer todos». Al menos confía que los combustibles no empiecen de nuevo a subir y afectar a los bolsillos de los conductores. «Es importante que se vigilen los precios para evitar excesos».

Algo preocupado se muestra Francisco Sánchez, que tiene una furgoneta que utiliza como su forma de vida realizando mudanzas y chapuzas varias. Aunque la ayuda va a beneficiar a los transportistas, él no tiene claro si podrá aprovecharse de ella. «Espero que hayan pensado en todos los autónomos, que somos muchos». La bonificación – contestando a su duda– se abonará a los transportistas que ya se acogen al gasóleo profesional al final de cada mes. Para los que no, deberán solicitar la ayuda a través de la sede electrónica de la Agencia Estatal de Administración Tributaria.

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