María Bastazo llega a la caja de Carrefour con dos carros de la compra llenos hasta los topes de comida y bebida para la próxima ... Navidad. Alertada por las noticias que hablan del aumento del coste de numerosos productos y del posible desabastecimiento en determinados artículos, esta semana ha decidido no esperar más y ha adelantado la compra que siempre suele hacer días después del puente de diciembre. «Está subiendo todo y no quiero quedarme sin los productos que quiero para las fiestas», señala.
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El caso de María no es extraordinario. Esta malagueña, vecina de Ciudad Jardín, es una de las tantas que ha decidido adelantar las compras navideñas por temor al desabastecimiento y al aumento de costes que se espera para las próximas fiestas y que ya ha comenzado a notarse en numerosos productos y servicios. Aunque todavía queda más de un mes para el inicio efectivo de la Navidad, las ventas en diferentes sectores se han multiplicado, fundamentalmente en alimentación y juguetes. «Siempre me gusta ser previsora, pero este año más que nunca», confiesa.
46por ciento de los consumidores esperan adelantar sus compras navideñas al mes de noviembre, según un estudio elaborado por Idealo
300euros gastarán como máximo las familias andaluzas en juguetes, cuatro puntos más que la media española, según Sensormatic
Basta con darse una vuelta por los comercios del Centro o por cualquiera de los centros comerciales que hay en la provincia para comprobar que la Navidad ya asoma de forma prematura en el ambiente. Algunos, como El Corte Inglés, incluso ha inaugurado ya las luces; mientras que en otros se anuncia con carteles gigantes la previa del Black Friday que se celebrará el próximo 26 de noviembre y que será el verdadero pistoletazo de salida a las fiestas.
«Las ventas van bien, mejor de lo habitual para estas fechas, aunque también hay muchas más personas esperando a que se pongan las ofertas del Black Friday», reconoce Ana, una dependienta de la tienda Zara. «A este paso, nadie va a dejar este año las compras para diciembre», apunta mientras atiende a un cliente en la caja registradora.
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Según los datos que maneja el sector, cerca del 60 por ciento de los consumidores adelantarán este año las compras a este mes, fundamentalmente atraídos por los descuentos que suelen acompañar Viernes Negro -algunas tiendas lo han prolongado hasta dos semanas antes de la fecha habitual-. Tanto es así que el 46% de los españoles pretende aprovechar los descuentos de estos días para comprar sus regalos de Navidad, según un estudio de Idealo.
Los consumidores andaluces van a ser los que más gasten en juguetes de todo el país. Así al menos lo reseña el tercer Informe sobre la Compra de Juguetes en España elaborado por la empresa Aldi. Según sus cálculos, la mitad de las familias andaluzas gastarán entre 100 y 300 euros en esta categoría en Navidad, y un 23% de ellas gastará entre 200 y 300 euros, lo que sitúa a la comunidad cuatro puntos por delante de la media española.
Otro dato significativo es que, a pesar de la pandemia, la mayor parte de los consumidores seguirá adquiriendo sus productos en tiendas físicas. El número de consumidores que irá a una establecimientos a pie de calle ha aumentado en siete puntos porcentuales respecto a 2020, a pesar del coronavirus y del auge del comercio electrónico, según el estudio «Retail: Shopper Sentiment Report» de Sensormatic Solutions. En concreto, el 64 por ciento recurrirá a un espacio físico, mientras que el 44% dice que no tiene intención de cambiar su hábito de comprar.
A pesar de ello, el comercio electrónico seguirá creciendo y una prueba de ello es el incremento de paquetes estimado para toda la campaña navideña. Según los datos que maneja el sector, las empresas logísticas gestionarán un total de 106 millones de envíos en este periodo, lo que supondrá un crecimiento de 7% respecto 2020 a nivel nacional.
Solo en el sector de logística y almacén se van a superar durante la campaña los 6.000 puestos de trabajo en toda España, un hecho que supondría un crecimiento del 200% respecto a la campaña prepandemia de 2019, según un informe realizado por Infojobs.
Entre quienes no han esperado ni al Black Friday se encuentra Lola Morán, una mujer que ayer salía del centro comercial Larios cargada de bolsas. En ellas llevaba ropa, zapatos y, sobre todo, muchos complementos. «Me gusta sorprender a todos los amigos con un detalle y este año quería agobiarme al no encontrar lo que quería», reconocía.
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Esta vecina de Benalmádena había aprovechado su día libre en el trabajo para bajar al Centro y resolver todos los regalos de adultos y, preferiblemente, los de los niños de la familia. «Este año no he querido apurar porque tampoco sabemos cómo va a evolucionar el virus y si después impondrán restricciones que dificulten las compras».
El temor al desabastecimiento también ha animado a adelantar las compras a Olga y a Jorge, una pareja de Carlinda que miraba juguetes en una tienda especializada junto al Vialia. «Nuestra hija lo tiene todo claro y si esperamos más nos podemos quedar sin los juguetes». Lidia, que es como se llama la hija, quiere un nuevo juego de Doraemon que les ha costado localizar algo más de lo esperado. «Nos han dicho que llegará a tiempo, pero no nos han dado toda la seguridad».
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Otro de los factores que está ayudando al adelanto de la campaña es el temor de muchos malagueños a las aglomeraciones. La incidencia de la pandemia y el recuerdo de centros comerciales llenos ha animado a Margarita Salas a comprar ya todo lo que pueda. «He venido muy temprano para que no hubiera mucha gente; no estoy dispuesta a soportar aglomeraciones dentro de las tiendas», explicaba en uno de los pasillos de El Corte Inglés.
Aunque los compradores aún no han salido a comprar en masa -el aumento de cliente se nota fundamentalmente durante los fines de semana-, el presidente de la asociación Málaga Comercio, Salvador Pérez, se muestra precavido a la hora de hablar sobre el desarrollo de la campaña navideña. «Tenemos una incertidumbre total», resume. Aunque esperan que sea buena y que las ventas superen a las del catastrófico 2020, no esconde que el aumento de precios les va a pasar factura a todos. «Todo nos ha aumentado mucho y no podemos aumentar tanto los precios», argumenta.
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Pérez, al igual que los consumidores, se muestra preocupado por la próxima evolución de la pandemia, que podría influir de forma negativa en las compras en el caso de decretarse algún tipo de medida restrictiva. Y por eso mismo entiende que los compradores estén aprovechando estas semanas para cargar los zurrones. «Vamos a tener un final año un tanto atípico y no todo lo agradable que nos gustaría», vaticina.
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