Málaga vive el mes de agosto más caluroso desde que hay registros

La media absoluta en el aeropuerto (que es el termómetro oficial a efectos estadísticos) ha sido de 29,0 grados, según los datos del Centro Meteorológico de Aemet, lo que lo convierte en el agosto más caluroso desde 1942. De este modo, deja atrás, y de lejos, al anterior, que fue el de 2020 (28,2 grados) y al de 2015 (28,0). «Se ha batido el récord por mucho», advierte Jesús Riesco, director de Aemet en Málaga.

Este mes ha marcado un hito también si se tienen en cuenta otros factores, como la media de las temperaturas máximas: 33,7 grados; y también la media de las mínimas: 24,2. En este caso, el anterior era de 2015: 23,8.

En el conjunto de la provincia las series se remontan a 1961, y en este caso la media ha sido de 27,7, lo que supone 2,1 grados más que el valor medio del periodo de referencia (1991-2020). El récord anterior era de 2012 (27,3).

El meteorólogo también llama la atención por el hecho de que todos los récords de temperaturas máximas se han producido dentro del siglo XXI, lo que pone de manifiesto que se está produciendo un calentamiento evidente en los últimos años. «Todos los últimos años en agosto desde 2018 han sido cálidos, muy cálidos o extremadamente cálidos», especialmente los años 2023, 2021, junto a 2012. Aunque todavía no es definitivo, es probable que el de este año terminará siendo el verano más caluroso desde que hay registros.

En cuanto a las causas, Jesús Riesco apunta a dos: el terral ha hecho que se haya pasado de los 40 grados en cuatro jornadas: los días 1, 2, 3 y 18. Y a ello se suman las sucesivas olas de calor que han afectado a toda España, que también han tenido su reflejo en Málaga. «No es que haya habido un día con una temperatura excepcionalmente alta, pero sí más de lo normal y por encima de la media casi todos los días».

José Luis Escudero, experto en la meteorología malagueña y responsable del blog meteorológico de SUR.es, añade otro factor, y es que las mínimas han sido excepcionalmente altas todo el mes de agosto, «por encima de los 24 grados todos los días; hemos tenido varios días de terral y han entrado masas de aire cálida». A ello, agrega el hecho de que el agua del mar ha estado muy caliente todos los días, salvo dos, y ello también se ha dejado notar en las temperaturas de la atmósfera y en la sensación de bochorno por la elevada humedad relativa.

De este modo, agosto sigue la senda iniciada en julio, que también fue en la capital el más caluroso desde que hay registros oficiales de la Agencia Estatal de Meteorología. El ubicado en el aeropuerto de Málaga, el termómetro oficial de Aemet a efectos de análisis de la evolución del clima en la provincia, arrojó entonces una temperatura media de 29,5 grados, que son 3,4 grados más que en el periodo de referencia (1991-2020).

Esta cifra lo sitúa como el mes (no sólo incluye los julios, sino también los agostos) más cálido de los 81 años de la historia meteorológica malagueña, incluido el mes pasado (29 grados). El séptimo mes del año estuvo marcado no sólo por el terral, que estuvo presente en 15 de los 31 días; sino que el resto de jornadas el levante vino acompañado de una humedad bochornosa que elevó la sensación térmica.

Tras la Dana, la capital encadena varias jornadas marcadas por la nubosidad y temperaturas más bajas de las habituales para esta época, que al menos alivian el estrés hídrico. Las máximas se quedarán rondando los 28 grados, con régimen de levante (húmedo), aunque las mínimas seguirán altas, por encima de los 20 grados.

El fin de semana todavía hay posibilidad de chubascos, aunque muy débiles y dispersos. Esto se deberá al cambio de viento a levante y aire frío en altura. Dicha situación se mantendrá, según la Agencia Estatal de Meteorología, al menos hasta el domingo.

Al menos, las predicciones a medio plazo de los modelos meteorológicos apuntan a la posibilidad de que la lluvia comience a dejarse ver en la provincia a lo largo de las próximas semanas, si bien a corto plazo Aemet todavía no las atisba.