Málaga es una de las provincias de España donde se venden más coches antiguos de segunda mano

El drástico descenso de las matriculaciones contrasta con el auge de la compraventa de vehículos con más de 20 años, los llamados 'mileuristas'. Si bien este apodo se acuñó años atrás porque su precio rondaba los mil euros, ahora habría que hablar más bien de 'dosmileuristas' o 'tresmileuristas', porque la fuerte demanda ha llevado también a un encarecimiento del mercado de usados.

Málaga encabeza el ránking andaluz de transmisiones de este tipo, y es una de las provincias españolas con más operaciones. Un total de 3.870 automóviles con 20 años o más han cambiado de manos de enero a junio, lo que supone un crecimiento del 33% respecto al mismo periodo del año pasado. Sólo Sevilla se acerca, con 3.388 unidades y un crecimiento del 21,8%; mientras que en Granada fueron 2.890 (21% más).

En el cómputo nacional, las ventas de vehículos de más de 20 años crecieron un 18% en el primer semestre y uno de cada diez autos vendidos de ocasión arrastra ya dos décadas de uso. En torno a un 16% de los coches que circulan por España se compraron inicialmente en pesetas, aunque esta cifra es superior en Málaga.

Esta situación está fomentando el envejecimiento del parque móvil, donde la edad media supera los 13 años, la segunda peor de Europa, por detrás de Grecia. Y con lo que ello supone para la seguridad vial y el aumento de la contaminación atmosférica, dado que un coche nuevo emite un 99% menos de partículas respecto a uno de 15 años, según Anfac.

La situación se explica, según indican fuentes de Sumauto, por el empobrecimiento de muchos hogares, en un contexto de elevada inflación, de manera que los precios de los vehículos nuevos e incluso los de ocasión con menos años están en niveles difícilmente accesibles para muchos hogares. Actualmente, un usado se sitúa en 17.561 euros de media, según MSI; mientras que uno nuevo se mueve en un promedio de 20.500 euros, en datos de la Agencia Tributaria. Los coches 'mileuristas' son el clavo ardiendo al que se agarran muchas familias, algo que pueden pagar al contado.

En contraste, julio se cerró con una nueva caída de las matriculaciones de clientes particulares de casi el 8% en los concesionarios de Málaga, con sólo 1.152 unidades vendidas. Mientras que el mercado total se deja un 19% (2.214 operaciones). Los ciudadanos de a pie han comprado en lo que va de 2022 casi 7.600 turismos nuevos, lo que supone un aumento del 11% respecto a 2021.

Esto supone que por cada dos coches recién salidos de fábrica que se ponen en circulación, uno con más de 20 años se deja de achatarrar y cambia de manos para seguir andando. Y a ello hay que añadir las ventas del mercado de ocasión (habitualmente, entre uno y diez años) que son realmente los turismos más vendidos.

Carlos Oliva, presidente de la Asociación Malagueña de Automoción (AMA), que es la patronal de los concesionarios, considera «preocupante» el auge de los vehículos 'mileuristas', y lo achaca a la incertidumbre reinante respecto a la economía y el futuro de los motores. «La búsqueda de soluciones económicas se debe muchas veces a la desorientación sobre los nuevos tipos de vehículo (eléctricos, híbridos, etc) y lo que va a pasar con los combustibles; son soluciones de movilidad a muy corto plazo».

Oliva valora estos datos como «una mala noticia»: «Entiendo que la gente necesita movilidad, pero estos vehículos suponen un riesgo, primero para el que los conduce, con medidas de seguridad muy antiguas, sin ayudas a la conducción, ni ABS ni a veces Airbag; y a nivel medioambiental contaminan 10 ó 15 veces más».

Se da la paradoja de que la alta demanda de coches viejos ha hecho que estos multipliquen su precio, y si antes la referencia eran unos mil euros (de ahí el apodo de 'mileuristas') ahora pueden llegar a costar de 2.000 a 3.000. «Han subido mucho, y todavía pueden salir más caros, si hablamos en términos de seguridad y de averías».

A ello, añade el hecho de que su durabilidad es muy corta, y con altos costes de mantenimiento. «Vemos coches de 500 euros que antes iban directamente al desguace y ahora se vuelven a introducir en el mercado, y con problemas en las suspensiones o en los frenos; algunos van muy justitos para circular». Por ello, Carlos Oliva recomienda a quienes se embarquen en operaciones de este tipo que, al menos, comprueben que el coche tiene una ITV pasada recientemente.