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Continúan los movimientos internos dentro del socialismo malagueño. Un grupo de militantes de la provincia está recogiendo firmas de adhesión a un documento donde abogan ... por un cambio en el PSOE de Andalucía en el congreso regional que deberá celebrarse a final de este año. En el documento 'Rearmar el socialismo andaluz, una necesidad ineludible' se aboga por una reformulación del partido en «discurso, formas y personas». La aparición de este documento coincide en el tiempo con las apelaciones que desde el sector andaluz más afín a Pedro Sánchez se está haciendo a Susana Díaz para que siga el 'modelo Iceta' y facilite un relevo en el liderazgo del PSOE-A mientras que la secretaria general insiste en que se presentará a las primarias cuando estas se convoquen.
El documento, al que tuvo acceso este periódico, ha sido firmado ya por 75 militantes de 28 agrupaciones de la provincia y los promotores esperan que la cifra vaya en aumento en los próximos días. Entre quienes lo han suscrito se encuentran el exdelegado del Gobierno de la Junta en la provincia José Luis Marcos; el exsenador Manuel Arjona; los que fueran alcaldes José Sánchez (Álora), Jesús Galeote (Campillos), Pilar Ortiz (Canillas de Aceituno) y María del Mar González Vera (Ardales) –esta última además es integrante de la ejecutiva provincial como secretaria de Desarrollo Municipios Rurales–; la exvicepresidenta de la Diputación de Málaga Paloma Alonso Sahagún; o quien fuera aspirante a dirigir el partido en Málaga en las primarias de 2017 y exportavoz en el Ayuntamiento de la capital, Rafael Fuentes.
En el texto se denuncia el proceso de «degradación» tanto orgánica como de imagen del PSOE ante sus votantes y se considera «imprescindible» que la militancia andaluza se reúna en torno a un proyecto de «profundo cambio orgánico». «Un cambio que no puede ser exclusivamente la sustitución o continuidad de personas que ostentan dicho poder orgánico, sino la erradicación de un modelo donde ha primado el esfuerzo para perpetuar a determinadas personas dentro de cuadros orgánicos, sometidos a la voluntad personalista de la cima de una pirámide, que ha mantenido sin voz durante años a la base compuesta por la militancia que la sostiene», añaden.
Asimismo, advierten de que el actual gobierno de PP y Ciudadanos en Andalucía con su presidente, Juanma Moreno, a la cabeza «están consolidando su posición» y las perspectivas electorales apuntan a «un largo periodo de gobiernos conservadores apuntalados por la extrema derecha». En este contexto, los promotores de este documento sostienen que frente a la actitud «resignada» de la dirección del PSOE de Andalucía hay quienes apuestan en el partido por «una reformulación del proyecto socialista andaluz en todas sus dimensiones: discurso, formas y personas».
«Sólo un profundo y radical cambio de dicho proyecto abre una ventana de oportunidad ante un futuro que se adivina aciago. Dicho cambio no es garantía de éxito, pero mantener la actual inercia sí es garantía de fracaso», añade un documento, donde se apostilla: «Porque nunca un proyecto sólido y de futuro se fraguó a partir de los restos de un naufragio, es ineludible rearmar el proyecto socialista en Andalucía a partir de un profundo cambio que alumbre una nueva etapa de desarrollo y progreso en nuestra comunidad».
Los promotores de este documento consideran que el PSOE andaluz debe acometer un proceso de renovación y revitalización del partido como el vivido en 2017 con la llegada de Pedro Sánchez a la secretaría general tras vencer en las primarias a Susana Díaz y protagonizado por la militancia. «Un proceso que ha llevado en España a tener nuevamente un presidente del Gobierno socialista. Nuestro secretario general y presidente Pedro Sánchez creyó en un proyecto político generado por la ilusión de los militantes, lo asumió y lo está llevando a buen término a pesar de todas las adversidades. Andalucía no puede ser menos, y necesitamos un nuevo proyecto ilusionante generado por la militancia y a un presidente que lo asuma y sepa llevarlo a buen término», remarca el texto.
Asimismo, en el documento se hace un diagnóstico de los factores estructurales que han dado lugar al «desplante» que la ciudadanía andaluza le hizo al PSOE-A en las elecciones autonómicas hace dos años. Entre ellos, mencionan la falta de visión y actitud estratégicas; la endogamia; la institucionalización del partido; una gestión mejorable porque la gestión socialista en las instituciones andaluzas «no ha sido sinónimo inequívoco de buenas prácticas ni el partido ha velado suficientemente por ello»; y la pérdida del referente andaluz porque el PSOE-A actual «no es ya el referente en el que Andalucía se reflejaba».
«Ningún cambio profundo y real es factible si quienes lo tienen que afrontar son las mismas personas que propiciaron su necesidad. No se pretende deslegitimar ni minusvalorar el trabajo llevado a cabo durante tanto tiempo, sólo se quiere garantizar y hacer creíble una nueva concepción del proyecto socialista en Andalucía», apostilla el documento.
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