Un padre con su hijo caminando por las calles de Málaga en un día de sol. Ñito Salas

Málaga es la provincia andaluza que más excedencias pide para cuidar familiares

La mayor creación de empleo estable y un entorno empresarial más moderno explican que, además, la proporción de hombres que se toma estos permisos sea mayor que en otras provincias

Miércoles, 2 de agosto 2023, 00:18

Málaga es la provincia andaluza en la que mayor número excedencias por cuidado de familiares se producen. En concreto, una de cada tres dadas de alta durante el primer semestre en la comunidad autónoma se efectuaron en Málaga. Además, también se da otra particularidad en ... este territorio: la proporción de hombres que se cogen una excedencia por cuidados es ligeramente más elevada que la media andaluza. Las 175 excedencias masculinas representan casi el 21% de las 837 que tuvieron lugar en total entre enero y junio en la provincia, frente al 17,4% que suponen las 496 excedencias de varones de las 2.844 que en total se registraron en Andalucía en el mismo periodo. En el conjunto de España la estadística es todavía peor: sólo el 15% de las excedencias dadas de alta en el primer semestre del año correspondieron a varones.

Publicidad

El número de excedencias en Málaga supera a las registradas en Sevilla, pese a que esta última provincia tiene mayor población y también más personas ocupadas: según la última Encuesta de Población Activa, las 717.500 de Málaga contrastan con las 785.200 de Sevilla. De esta manera, las 837 excedencias dadas de alta en la provincia malagueña contrastan con las 658 de la capital andaluza.

Diversas expertas lanzan hipótesis para explicar por qué en Málaga hay más excedencias por razón de cuidados y por qué también en mayor proporción las cogen varones -aunque todavía los permisos masculinos están muy por debajo de los que solicitan las mujeres, también en la provincia-. Cristina García Romero, responsable de Igualdad de UGT Málaga, explica que un factor que puede influir es el tipo de empleo que sobresale en la provincia en comparación con otros territorios de Andalucía: el tecnológico. Se asume que es un tipo de actividad que introduce un cambio de cultura laboral y empresarial. No todo el mundo puede cogerse una excedencia y quizás las actividades relacionadas con las nuevas tecnologías pueden ser más amigables con estas opciones. También está vinculada a un mayor número de excedencias una mayor estabilidad en el empleo: «Es más propicia a pedir excedencias», señala García Romero, quien señala que también en la provincia de Málaga, incluso en actividades del sector servicios, hay cada vez más contratación estable.

Más hombres que en otras provincias

La leve diferencia existente en cuanto a peso que representan los hombres en las excedencias registradas en el primer semestre de este año (representan el doble que, por ejemplo, en Huelva o en Cádiz, donde los varones apenas se toman el 10% del total de este tipo de permisos) implica una mejora en términos de corresponsabilidad masculina en los cuidados de familiares -esta estadística incluye tanto hijos como otro tipo de familiares-. Laura Baena, fundadora del Club Malasmadres, si bien considera que esta brecha de Málaga con otros territorios «no es tan determinante», la atribuye al «desarrollo económico de la provincia y a una mejora de la concienciación social». «Desde la Asociación 'Yo no renuncio' estamos trabajando en mejorar la corresponsabilidad de Málaga en un proyecto que comenzó en marzo de este año y que continuará en septiembre», explica Baena.

Publicidad

Las expertas consultadas coinciden en lo que sintetiza Baena: «Las excedencias son un indicador de que la conciliación sigue sin funcionar». «Las medidas de conciliación no son suficientes porque las personas necesitan pedir excedencias», insiste. En este sentido, la representante de UGT también señala que alguien se coge un permiso de estas características «porque no tiene más remedio», «porque no hay otras respuestas desde lo público». La excedencia supone renunciar a un salario. De esta manera, revela que cuando en una empresa hay muchas jornadas reducidas o muchas excedencias, en la negociación colectiva los sindicatos tratan de avanzar en alternativas como la adaptación de los horarios, la reorganización de los tiempos de trabajo o el teletrabajo.

Fuerte crecimiento de las excedencias

Adriana Escalona, especialista en políticas de igualdad y directora de En Género, una consultora que ayuda a las empresas a diseñar sus planes de igualdad, insiste en que lo más relevante de las últimas estadísticas publicadas por el Ministerio de Inclusión es que son las mujeres quienes siguen copando las excedencias, así como su enorme crecimiento en comparación con el año anterior -aunque el repunte hace que los números regresen a los niveles pre-Covid-. Con respecto a lo primero, señala que una de las causas -y luego consecuencia- es la brecha salarial: como las mujeres suelen estar en sectores o en puestos peor remunerados, ante la necesidad familiar de cuidar, son ellas quienes se plantean tanto el recorte de jornada como una excedencia. Susana Torres, secretaria de mujeres e igualdad de CC OO en Málaga, sintetiza que los hombres optan menos a una excedencia por cuestiones de mentalidad -aún se asume que las tareas de cuidados corresponden a las mujeres-, por razones económicas -los salarios masculinos suelen ser más elevados- y por la presión de las empresas o comentarios más o menos explícitos contrarios a que sean los hombres quienes ejerzan este derecho porque supone una ruptura de los roles tradicionales de género.

Publicidad

Como son ellas quienes en mayor medida se cogen las excedencias, también son ellas las que sufren los perjuicios asociados: su cotización a la Seguridad Social se resiente -si el periodo de la excedencia se extiende más allá de los tiempos en que la legislación no contempla penalización-, además de que puede ver perjudicadas sus aspiraciones de promocionar en la empresa.

En cuanto al importante crecimiento de las excedencias registradas en el primer semestre (un 50% más en comparación con el mismo periodo de 2022 tanto en Málaga como en Andalucía y un 45% más en el conjunto de España, para volver a cifras pre-Covid), para Carolina Vidal, secretaria de mujeres, igualdad y condiciones de trabajo de Comisiones Obreras, ello se debe a que ahora hay más mujeres que nunca trabajando -y son ellas las que representan el grueso de personas que acceden a las excedencias- y a que han mejorado las cifras de estabilidad en el empleo. Aunque también señala la otra cara menos amable: la mayor incidencia de las excedencias en algunos territorios puede responder a políticas públicas insuficientes que hacen recaer en los bolsillos de las personas y de las familias en forma de menos ingresos salariales las eventualidades de la vida que requieren cuidados de los más cercanos, tanto mayores como niños.

Publicidad

Prestación no económica o excedencia para el cuidado de familiares

Todos los trabajadores por cuenta ajena pueden pedirse una excedencia por cuidado de hijos, tanto naturales como adoptados, así como de menores acogidos. También, para atender a otros familiares hasta el segundo grado de consanguinidad o afinidad, siempre que por razones de edad, accidente, enfermedad o discapacidad no puedan valerse por sí mismos. De acuerdo con la normativa, los tres primeros años del periodo de excedencia que los trabajadores disfruten para el cuidado de cada hijo o menor acogido serán contemplados como periodos efectivamente cotizados; lo mismo sucede con el primer año de excedencia que los trabajadores disfruten para el cuidado de otros familiares. El trabajador conserva el derecho a la reincorporación en su empresa.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad