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El balance de la lluviosa Semana Santa ha sido nefasto para los cofrades y muy decepcionante para los negocios de hostelería, pero en el otro lado de la balanza se suma no sólo la gran cantidad de agua que ha llegado a los pantanos, sino ... también la fuerte creación de empleo registrada en el mes de marzo, que ha llevado a la provincia a encabezar la bajada del paro a nivel nacional. El pasado mes se cerró en Málaga con 3.095 desempleados menos de los que había a día 1 (-2,3%). La cifra de demandantes de empleo queda situada así en 131.148, el nivel más bajo para un mes de marzo desde 2008. Este año sigue representando un umbral que no consigue cruzar la provincia por más que lleve varios años reduciendo su nivel de desempleo. Respecto a hace un año, la provincia tiene 6.512 parados menos (-4,7%).
En el ranking nacional de provincias con mayor bajada del paro, Málaga va seguida de otras con marcado protagonismo turístico en Semana Santa, como son Santa Cruz de Tenerife (-2.456) y Sevilla (-2.289). El descenso se extendió a 46 provincias y solamente seis sufrieron un aumento del desempleo, siendo Madrid la primera de ellas (+701).
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El fuerte descenso registrado en Málaga ayudó a que Andalucía fuera también la comunidad autónoma donde más bajó el paro en marzo, con 11.374 parados menos. La siguen Canarias (-4.686) y Comunidad Valenciana (-3.998). El desempleo solo subió en dos regiones: País Vasco (+926) y Comunidad de Madrid (+701). Andalucía consiguió así bajar de los 700.000 parados (concretamente se queda con 699.533), según los datos difundidos hoy por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.
La bajada del paro se extendió a todos los sectores de la economía malagueña, pero fue el ramo de los servicios el que tiró con más fuerza del carro, restando 2.945 personas a la cola del paro. Industria, construcción y agricultura registraron bajadas más discretas de 172, 74 y 42 desempleados, respectivamente. El colectivo sin empleo anterior aumentó en 138 personas. Por sexos, el registro de parados se divide entre 79.095 mujeres y 52.053 hombres. Ellas representan, pues, el 59% del total.
Este descenso del paro va acompañado de una fuerte subida de la afiliación de trabajadores a la Seguridad Social. En marzo, en Málaga estuvieron trabajando 12.854 personas más de media que en el mes anterior (+1,9%). Este aumento es el cuarto más cuantioso de toda España, después del de Baleares (+33.322), Barcelona (+17.028) y Madrid (+17.002).
Y así, la media de cotizantes del mes de marzo en Málaga queda situada en 696.970. La comparativa interanual arroja un llamativo crecimiento del empleo: hay 21.990 personas más trabajando que hace un año (+3,3%).
Este balance está condicionado por el hecho de que en 2023 la Semana Santa se celebró entre el 2 y el 9 de abril, aunque también es cierto que la mayoría de contrataciones asociadas a dicho periodo vacacional se produjeron en marzo.
Desde CC OO Málaga hacen una interpretación positiva de los datos conocidos hoy, aunque señalan una «leve ralentización del mercado laboral» en comparación con los meses de marzo de los últimos años coincidiendo con la época vacacional de Semana Santa. A la vez, destacan que Málaga «lidera la creación de empleo en Andalucía, con una variación anual de 22.000 cotizantes, que representa un incremento del 3,26% frente al 1,96% de la media andaluza». Para el sindicato, el reto principal es «la estabilización del empleo con condiciones laborales y salariales de calidad».
La secretaria de Empleo y Formación de UGT, Luisa Domínguez, señala que los datos de paro registrado y contratación son «muy positivos», pero considera que no se puede olvidar «que se trata de un empleo no estable causado en el periodo vacacional de Semana Santa, por lo que consideramos que siguen siendo necesarias políticas que generen un empleo estable, y todas aquellas medidas que lo impulsen». El sindicato pide que se dé cumplimiento «al Pacto Social y Económico por el Impulso de Andalucía, que se firmó hace un año entre la Junta de Andalucía y los agentes económicos y sociales, en el que se adoptaron, entre otros, un Plan Urgente de Empleo Juvenil, así como otras medidas para colectivos de personas vulnerables».
El secretario general de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Luis Fernández-Palacios, coincide en esta interpretación positiva y añade que en los próximos meses «el ritmo de creación de empleo va a venir marcado por el dinamismo económico y por las medidas que en el ámbito de las relaciones laborales se puedan impulsar, que ayuden a la creación de empleo por parte de las empresas». En este sentido, ha animado a que las medidas vayan destinadas a «generar confianza e impulsar la inversión» y que sean negociadas en el marco del diálogo social.
Para la CEA, los datos andaluces del paro son fruto del «dinamismo económico que tiene Andalucía». «Estos datos se dan en una coyuntura compleja, con un entorno marcado a nivel internacional por la incertidumbre económica y con proliferación de nuevas cargas y costes laborales impuestos por el Estado que no ayudan a la creación de empleo».
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