Las lluvias de marzo retrasan la temporada de riesgo alto de incendios en Málaga

Este 2024, las lluvias de marzo han elevado in extremis los niveles de humedad de la masa forestal y suponen una vuelta a la normalidad en una campaña en la que sube el presupuesto y se incorporan nuevas herramientas digitales de análisis y estrategia contra los incendios (el Sigdif, que ha comportado 2,5 millones de inversión). El Plan Infoca en toda Andalucía tiene un presupuesto de 243,34 millones de euros (134,9 para extinción y 108,4 para prevención), lo que supone un aumento del 11%.

La humedad de la masa forestal es clave: si es muy baja, hace fácil que el fuego sea más intenso y veloz en su propagación y que tenga un comportamiento errático e impredecible. Las borrascas Mónica y Nelson han salvado a los montes públicos andaluces y malagueños de una temporada todavía más peligrosa de lo habitual.

La nueva campaña contrasta con la situación en la que se encontraban los enclaves forestales de Andalucía en 2023, un año extremadamente cálido y seco, el segundo más cálido y sexto más seco desde el comienzo de la serie en 1961, tónica que ha continuado durante el primer cuatrimestre de 2024, especialmente el mes de abril con temperaturas casi estivales. Eso sí, no hay que bajar la guardia porque las lluvias también han generado más vegetación, que cuando se seque, se traducirá en una mayor cantidad de materia combustible.

El equipo de profesionales estará compuesto por 4.700 efectivos, una cifra similar a la del plan anterior, aunque la Junta está impulsando un proceso de contratación para los fijos-discontinuos, para los que contempla una partida de tres millones.

Así las cosas, el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) recogía hace unos días la Orden de 30 de abril de 2024, por la que se aprueba el Plan de prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales de Andalucía para 2024.

Andalucía cuenta con un centro operativo regional, 8 provinciales, 23 Cedefo (centros de defensa forestal), 10 subcentros de defensa forestal 3 bases de brigadas especializadas, 28 de helicópteros, 11 de aviones, 88 balsas de agua para medios aéreos, 2.028 puntos de tomas de agua, 198 puntos de puntos de vigilancia, 174 repetidores, 59 enlaces y 4.628 equipos de comunicaciones.

En Málaga, el Centro Operativo Provincial está en el Parque Tecnológico de Andalucía; los Cedefo de Colmenar y Cártama; la Brica, la pista de aterrizaje de Cártama y dos aviones anfibio en el aeropuerto de Málaga. Los tres helicópteros con base en la provincia de Málaga están en Colmenar, Ronda y Málaga.

Este año, la región contará con 117 vehículos autobomba, 9 vehículos meteorología y transmisiones, una unidad de planificación y seguimiento radicada en Málaga y enviada por el Ministerio de Transición Ecológica en la temporada de mayor riesgo, 2 unidades de seguimiento de grandes incendios, 1.214 vehículos de transporte de personal, 14 aviones y 28 helicópteros de distinto tipo.

En Andalucía, 2.457 municipios tienen planes de prevención de incendios forestales. Y en la provincia hay 75 municipios que tienen total o parcialmente catalogados sus términos como zona de peligro.

En Málaga, por su parte, el plan se diseña para 41.278 hectáreas de monte público autonómico, 73.650 de ayuntamientos y 5.881 del Estado. En total 120.809 has. Son 166 montes públicos en total los que suma la provincia, que cuenta con 41 municipios catalogados forestales. Son aquellos que poseen más de un 50 % de territorio ocupado por superficie forestal y superficies naturales no alteradas y población inferior a 30.000 habitantes. Hay 361 de estas localidades en Andalucía.

Como siempre, en la temporada de alto riesgo, estará prohibida la quema de rastrojos, las barbacoas, etc. Los datos recogidos por el Plan Infoca revelan que un 29% de los fuegos son intencionados; un 24% por negligencias; un 14% accidentales y un 4%, de origen natural. En cambio, en uno de cada cuatro no se puede determinar de manera precisa el origen.

El Plan Infoca de este año recoge como periodos de peligro medio del 1 de mayo a 31 de mayo y de 16 de octubre a 31 de octubre. Por contra, el peligro bajo es del 1 de enero a 30 de abril y de 1 de noviembre a 31 de diciembre.

Málaga registró entre 2013 y 2022 un total de 1.698 fuegos y conatos en las temporadas altas de riesgo. El año pasado, 2023, se saldó con datos moderadamente positivos que dieron al traste con un clara tendencia al alza. Hubo 74 actuaciones en incendios forestales y 112,05 hectáreas afectadas.

Suele decirse, por otra parte, que los incendios forestales se apagan en invierno. En este sentido, la provincia cuenta con 2.604 kilómetros de caminos de red viaria forestal. Para este 2024, los operarios forestales han actuado sobre 7,66 millones de metros cuadrados en trabajos preventivos para un total de 130 actuaciones tanto manuales como mecanizadas (zanjas, fajas, cortafuegos...)