Leticia Leermakers nació en Argentina, pero hace dos décadas se vino a España. Primero estuvo en Cuenca. Después, en Benalmádena. Era empleada de hostelería y ... se sentía estancada. Así que hizo otra vez las maletas y se fue a Londres a aprender inglés mientras trabajaba en la organización de eventos. De vuelta en la Costa del Sol puso en marcha un negocio, Málaga Tandem Club, contra la soledad, ese mal común entre los expatriados. Todos los días organiza intercambios de idiomas en los que se dan cita extranjeros que quieren practicar el español y malaguitas que buscan perfeccionar la lengua de Shakespeare. Esos idiomas componen su tándem.
Publicidad
Pero no sólo es anfitriona de estos encuentros lingüísticos en bares. También organiza fiestas en la playa, excursiones en bici, quedadas para ir a conciertos de rock –su gran pasión– y en los días clave, ésos en los que tan importante es verse arropado, como la Navidad, planea fiestas. Ahora va tomando forma su sueño: el de crear un espacio cultural en la capital para «dar un hogar» a la comunidad que ha creado y que cuenta con 30.000 personas.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
La explicación al estruendo que sobresaltó a Valladolid en la noche del lunes
El Norte de Castilla
Santander, capital de tejedoras
El Diario Montañés
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.