La hoja de ruta del metro hasta El Palo y Rincón de la Victoria

Ignacio Lillo

Málaga

Martes, 3 de octubre 2023 | Actualizado 04/10/2023 18:10h.

Comenta

El Plan de Transporte Metropolitano del Área de Málaga, aprobado ayer, incluye los proyectos e infraestructuras de movilidad que se van a ejecutar (o al menos, a planificar) en el área metropolitana hasta 2030. Estas se incluyen en el capítulo dedicado al plan de acción, según el documento final, al que ha tenido acceso SUR. Entre las medidas a desarrollar a medio plazo, el programa destaca la necesidad de «mejorar la movilidad metropolitana en transporte público en el Corredor Este», lo que se hará mediante el «estudio de alternativas para la selección de una línea de altas prestaciones que conecte el Centro de Málaga con El Palo (fase 1) y Rincón de la Victoria (fase 2).

En este escenario, se van a considerar los siguientes modos de transporte con rentabilidad social positiva: construir la línea 3 de metro; la línea 3, pero mediante tranvía (sólo hasta El Palo); un sistema de alta capacidad BRT (metrobús) hasta El Palo y Rincón, o el incremento de la oferta actual de líneas de autobús urbano e interurbano.

¿Cómo se va a tomar esta decisión? Lluis Sanvicens, que fue técnico de la concesionaria del metro y ahora es consultor independiente de movilidad en Málaga, explica la hoja de ruta necesaria para que el metro pueda ser una realidad. Y la primera clave para valorar las propuestas es el análisis coste-beneficio multicriterio. Este cosidera la TIR (Tasa Interna de Rentabilidad), que tiene en cuenta sobre todo el coste de la inversión y explotación en relación con los beneficios sociales, especialmente el ahorro y la ganancia de tiempo, «que es el elemento que va a determinar realmente lo que se hace».

«Que la Junta abra el melón de volver a hablar del tranvía a El Palo es interesante, porque es un medio agradable y más factible en cuanto a inversión. Además, propicia la transformación urbana, para repensar el paseo marítimo, y aprovecha el material móvil que ya tenemos». En cambio, considera que el metro soterrado tardaría mucho en hacerse y la inversión necesaria es muy elevada, «por lo que genera frustración en la ciudadanía».

En el caso de Rincón, advierte de que llevar el Cercanías tendría primero que atravesar la zona este de Málaga y es complicado, por lo que a corto plazo apuesta por un BRT o por continuar el tranvía de El Palo, «aunque sólo si los tiempos de viaje son competitivos». La misma solución ve para la prolongación norte, hasta Ciudad Jardín desde el Civil.

Noticia relacionada

El PP inicia una campaña para exigir el tercer carril en la zona Este de Málaga

Al margen de la decisión final sobre el medio con la mejor relación coste-beneficio, ya es fundamental que estas opciones aparezcan en el planeamiento, puesto que, de lo contrario, no se podrían ni siquiera tener en cuenta a efectos de una eventual inclusión en los Presupuestos de la Junta.

En cuanto al Corredor Norte, el Plan propone el estudio de alternativas para la selección de una línea de altas prestaciones que conecte la línea 2 del metro desde el Hospital Civil hasta Ciudad Jardín, que igualmente podrá ser una prolongación soterrada del suburbano; mediante tranvía en superficie, mediante BRT (metrobús) o con lanzaderas de autobuses.

Para el acceso a Málaga TechPark (comúnmente llamado PTA), se estudiará la posible prolongación de la línea 1 del metro; pero también una modificación de la Línea C-2 entre Campanillas y Estación de Cártama para crear una nueva estación en el recinto empresarial. Otras alternativas son: una nueva línea de cercanías C-2 express desde María Zambrano hasta el Parque (sin paradas intermedias); lanzaderas de autobuses desde la estación de metro Andalucía Tech, incluyendo la adecuación de la carretera A-7076. O bien una plataforma reservada (carril Bus-Vao) en la autovía A-357, lo que incluye la adecuación del viaducto en dicha carretera.

En cuanto a la Costa del Sol occidental, el Plan de Transporte Metropolitano también tiene en cuenta la necesidad de mejorar la movilidad metropolitana mediante transporte público en el Corredor Oeste, básicamente entre la capital y Fuengirola. En este caso, las propuestas pasan por la duplicación de más tramos en la línea C-1 de Cercanías, especialmente entre Fuengirola-Los Boliches, con lo que se podría alcanzar una frecuencia de 15 minutos. También habrá que incrementar la oferta de la línea 103 de autobuses metropolitanos.

Otras mejoras tienen que ver con el acceso hasta el Centro de Málaga, donde se ve necesaria la prolongación de las líneas C-1 y C-2 hasta la Plaza de la Marina; sin descartar la posibilidad de llegar hasta La Malagueta. Otras mejoras serán la prioridad semafórica para el transporte público en este eje; un nuevo acceso a la estación de autobuses desde la MA-20 (incluyendo nuevas dársenas); el fomento de la intermodalidad Cercanías-bus con una tarifa de transbordo económica y un carril bus en la Explanada de la Estación.

El documento también tiene en cuenta la integración de los municipios de Antequera, Valle de Abdalajís, Riogordo, Coín y Villanueva de la Concepción en el Consorcio de Transportes del Área Metropolitana, dado que todos ellos «cumplen el requisito establecido en el presente Plan de Transportes, de encontrarse dentro de la isocrona de una hora respecto a la ciudad principal».

En el caso de Alhaurín de la Torre, la principal acción ya está en funcionamiento y consiste en la implantación de una lanzadera entre esta ciudad y el Aeropuerto de Málaga. Por último, en la capital malagueña, se han previsto sendos estudios de viabilidad sobre la implantación de estaciones intermodales en la Plaza de la Marina y en la explanada de la Estación, ambas iniciativas que se incluyen en el Plan Litoral del Ayuntamiento.

El Plan de Transporte Metropolitano también fija una serie de objetivos de aquí a 2030, entre los que destacan: lograr que al menos el 25% de los desplazamientos que se hagan en esta zona sean mediante transporte público; una reducción de un 5% de la demanda del vehículo privado; el incremento de un 5% de modos no motorizados (bicis, patinetes).

Todo ello, según las estimaciones que hizo días atrás la consejera de Fomento, Rocío Díaz, supondrá sacar de las carreteras unos 52.000 coches y motos para ese año. Para ello, será necesario invertir 1.121,5 millones de euros, de los que el grueso se lo llevaría el metro de Málaga (863 millones), que se pagarán con fondos propios de la Junta de Andalucía (Autofinanciación, Fondos europeos Next Generation, FEDER 2021-2027); así como del Consorcio de Transporte Metropolitano; colaboración público privada; ayuntamientos y el Estado, en las infraestructuras que son de su competencia (como es el Cercanías).