

Secciones
Servicios
Destacamos
El presidente de la Asociación de Promotores y Constructores de España (Apce), Juan Antonio Gómez-Pintado, se encuentra desde este lunes en Málaga para participar ... en el cuarto Congreso Nacional de Vivienda que organizan los empresarios del sector inmobiliario. El fundador de Vía Ágora conoce la realidad del territorio malagueño que, como otros muchos del país, presenta una elevada tensión de precios que dificultan el acceso a la vivienda tanto en venta como en alquiler. Por ello, demanda a las administraciones que pongan más de su parte para incrementar la oferta de hogares, especialmente los de protección oficial.
- ¿Qué diagnóstico hace de la situación del mercado residencial?
- La situación del sector se resume en que no tenemos la capacidad de producir para poner en el mercado lo que requiere la gran demanda de vivienda que existe. Esto solo se solventa actuando en varios frentes. El primero es la seguridad jurídica en el urbanismo. El segundo es resolver la falta de mano de obra que estamos empezando a padecer. En los próximos años se va a jubilar el 30% de la población activa en nuestro sector, es decir, de la gente que está en obra. Y se nos jubilan en aquellos oficios que son más relevantes, los que tienen un mayor peso en el proceso de construcción. Para ayudar a paliar esta situación hay que facilitar la financiación para la industrialización. Y, por último, hay que avanzar en la innovación y la implantación de la inteligencia artificial, que es lo que vamos a abordar en este congreso.
- ¿Qué papel juega la inteligencia artificial en el sector de la construcción?
- Ya estamos trabajando en varias líneas. Por un lado, la arquitectura generativa. Por ejemplo, se pueden generar de forma automática modelos de edificios en función del tipo de pisos que se quieran construir y los parámetros legales de un determinado suelo. Lo que un arquitecto puede tardar entre tres y cuatro meses en desarrollar, la inteligencia artificial te lo da en horas. Eso es un avance importantísimo.
- No creo que los arquitectos estén muy contentos con eso.
- No se trata de sustituirlos, al final los arquitectos tienen que ser los que desarrollen estos diseños en los programas. Y, por otro lado, está la inteligencia artificial predictiva. Esto funciona cuando existe una gran base de datos y se pueden hacer análisis para hacer una predicción de lo que va a acontecer en el sector o con una determinada promoción inmobiliaria con muchísima antelación.
- ¿Sería como un estudio de mercado de lo que puede suceder?
- Sí, sería algo así. En función de los datos que se le den se puede saber la capacidad de una determinada ciudad para que tenga o no éxito una determinada promoción residencial, en qué barrios, qué tipología se pide en cada zona, cuál es el precio aconsejado... Y eso también se puede aplicar a los futuros clientes.
- En territorios de precios tensionados como es el caso de Málaga llevamos años escuchando la necesidad de agilizar la urbanización de suelos, construir más vivienda protegida, etcétera. ¿Hay alguna fórmula a corto plazo para paliar las actuales dificultades para acceso a la vivienda?
- Ahora estamos trabajando sobre todo en la colaboración público-privada, que salió de un planteamiento de la asociación de promotores a nivel nacional. Vimos que había muchísimo suelo de las administraciones públicas paralizado y que ellas no tenían capacidad para construir las viviendas protegidas, por lo que nos ofrecimos a hacerlo. ¿Cuál es el problema? Que vamos a distintas velocidades y eso está costando. Solo se avanzará en aquellas administraciones que sean dinámicas. Málaga es un ejemplo. El Ayuntamiento ha sacado un concurso de suelo importante con suelos para 1.168 VPO. Solo las administraciones con esa flexibilidad y velocidad para poner el suelo en marcha tendrán éxito.
- ¿Cree que las propias administraciones públicas también deberían construir por sí mismas viviendas protegidas y no dejarlo todo en mano de los privados?
- Un ejercicio de autocrítica sería bueno. España ha sido el país de Europa en el que se ha desarrollado más vivienda protegida privada. Eso se dejó, porque se retiraron todas las ayudas cuando llegó la crisis de 2008 y no se ha vuelto a retomar. Lo único que tenemos de protegido es el nombre. Las VPO no tienen ningún tipo de subsidiación de intereses como tenían anteriormente, ningún tipo de subvención... lo único que tienen son las trabas administrativas para desarrollarlas. Las instituciones deberían estar más a la par de lo que está sucediendo en la sociedad.
- Además de esas ayudas, ¿deberían poner algún ladrillo?
- Absolutamente. Las administraciones tienen empresas de vivienda pero están limitadas. Me gustaría ver cuál es el balance económico de una empresa municipal de vivienda. Con pólvora del rey es fácil hacerlo, porque si hay pérdidas se cubre con presupuesto público, pero los privados tenemos accionistas que tienen que tener un margen de beneficio. Las administraciones deben asumir una tipología de vivienda a la que nosotros no podemos llegar. Y nosotros estamos para una vivienda asequible a la que ellas no pueden llegar. En la conjunción es donde está el éxito. Nosotros no podemos hacer una vivienda social para realojo. Que nos faciliten el suelo y nos comprometemos a hacer reducciones sobre los precios tasados.
- En toda esta coyuntura, ¿en qué medida influye el uso turístico de los edificios?
- Es un problema en ciudades como Málaga. La pujanza de la ciudad está llamando a mucha gente. Tiene que haber una normativa clara para esa tipología de vivienda. No aconsejo mezclar vivienda de uso turístico con otras de residencia habitual, eso hay que regularlo. Pero no se pueden poner puertas al campo. El turista sigue viniendo, tiene interés, y hay que seguir promoviendo para dar respuesta a esto. En cualquier caso, hay que regular el uso turístico de las viviendas. La vivienda turística está expulsando a las familias que la necesitan para vivir. En conclusión: hay que poner más vivienda en el mercado.
- En el caso de Málaga, ¿cuándo se podría ver la luz al final del túnel para el problema actual del acceso a la vivienda?
- Málaga es una ciudad muy viva, brillante, un polo de atracción.... y tiene una gran suerte: tiene un equipo de gobierno municipal y un gobierno autonómico que vislumbran los problemas y tratan de ponerle solución lo antes posible. Me consta que están muy preocupados para dar soluciones. Esa solución va a ser anticipada a otros territorios españoles. Málaga es ganadora.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.