Instituciones de Málaga se unen para reclamar a la Junta que mantenga el Centro de Ciencia Principia

El alcalde, Francisco de la Torre, señaló al respecto que la postura del Ayuntamiento es reforzar este centro: «ni siquiera mantenerlo como está y menos todavía cerrarlo, sino potenciarlo. Desde que se conocieron los problemas en Principia, el Ayuntamiento ha trabajado para proponer soluciones. «Queremos crear mecanismos mediante convenios para nuestra colaboración que permitan reforzar ese papel», y de entrada se ofrece a aumentar la dotación municipal actual, que es de 30.000 euros al año, «todo lo que podamos presupuestariamente. Voy a tratar de ilusionarles y que se superen los obstáculos de los informes para continuar y reforzar», afirmó.

La Diputación de Málaga forma parte del consorcio que gestiona el centro. Su vicepresidente y responsable del área de Educación, Juan Carlos Maldonado, aseguró que las tres administraciones (Junta, Ayuntamiento y la propia Diputación) están trabajando para evitar el cierre. «Sería una pena, no queremos que se dé esa circunstancia, pero es algo que no depende solo de nosotros», dijo.

El secretario general del PSOE de Málaga y parlamentario andaluz, José Luis Ruiz Espejo, ha urgido al Gobierno andaluz de PP y Ciudadanos a buscar una solución «dentro de lo público» para evitar el cierre de este centro, una decisión que calificó de «golpe a los servicios públicos y a la promoción en la formación en ciencia y tecnología como una apuesta por la innovación y el futuro más inmediato. Quienes vinieron a renovar la política están acabando con las políticas públicas», afirmó.

El director del Parque Tecnológico, Felipe Romera, señaló que «la difusión de la ciencia y la tecnología es muy relevante para favorecer las vocaciones en las nuevas tecnologías», una labor que realizan desde este centro, y además desde edades muy tempranas, algo que considera fundamental para ese acercamiento de los jóvenes a estas disciplinas. Una opinión que comparte el director de la ETSI Informática, Ernesto Pimentel. «La labor de divulgación que realiza entre los escolares es excelente y, difícilmente, reemplazable», afirmó.

Pimentel develó algunos de los proyectos conjuntos en los que trabajaban. «Desde la Escuela estábamos promoviendo un proyecto donde la parte tecnológica del centro Principia residiese en las instalaciones de la Escuela, y donde los escolares tuviesen la oportunidad de complementar la parte más científica que ya aporta Principia en sus instalaciones. De esta forma, cada parte aportaba su experiencia en divulgación, formación e innovación en tecnología», indicó. «Y me sorprende –afirmó– que, cuando desde todos los ámbitos mostramos nuestra preocupación por la falta de vocaciones en estas disciplinas, una de las pocas herramientas que persiguen su divulgación, vaya a desaparecer».

Para el director de la escuela de Telecomunicación, Fabián Arrebola, su cierre «constituiría una pérdida significativa, lamentable y casi irreparable, tanto para la ciudad de Málaga como para su provincia, en materia de educación», y consideró «un sinsentido» que las administraciones no se pusieran de acuerdo para mantener las actividades que despiertan el interés de los jóvenes por la tecnología y la ciencia. Y desde la escuela de Industriales, su director, Alejandro Rodríguez, consideró que la demanda para estudiar grados en ingenierías, en buena parte, «viene dada por la labor que este centro viene desarrollando desde hace años».

El decano de la Facultad de Ciencias, Antonio Flores, señaló que si el problema es de normativa, «que se busque la solución jurídica adecuada», y espera que no sea por motivos económicos, pues supondría, en su opinión, que al gobierno andaluz «ha llegado la derecha más rancia», pues la inversión en educación «no puede medirse en términos de retorno económico», apuntó. Desde este mismo centro, el profesor Enrique Viguera, responsable del ciclo de conferencias 'Encuentro con la Ciencia', apuntó que «no podemos permitirnos el lujo de no formar científicamente a las nuevas generaciones». Y añadió que «dado que la gran mayoría de centros educativos de la provincia carecen de laboratorios de experimentación, posiblemente la visita a sus instalaciones son la única ocasión del alumnado de realizar experimentos, de usar el método científico y de interpretar y cuestionar unos resultados».

En estos 20 años de historia, el Centro de Ciencia Principia ha cosechado muchos reconocimientos. Entre otros, es Medalla de Oro de la Academia de Ciencias de Málaga. Su presidente, Fernando Orellana, considera que Principia «es un centro imprescindible para Málaga y para la ciencia. Cientos de miles de malagueños han pasado por allí y han aprendido a valorar y querer a la ciencia de una forma amable y rigurosa a la vez», indicó. Por esto, Orellana no entiende que «condicionantes administrativos» puedan paralizar un centro fundamental para Málaga y los malagueños. «La Academia Malagueña de Ciencias apoya incondicionalmente a Principia y exige su continuidad brindándonos para colaborar en todo lo que podamos», afirmó su presidente.