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La primera de las ocho jornadas de huelga convocada por los sindicatos CC OO y UGT en las inspecciones técnicas de vehículos de Andalucía, que afecta a las nueve estaciones de esta red en Málaga, tuvo como escenario principal en la provincia a la estación del polígono Guadalhorce de la capital. Esta es una de las más grandes de la comunidad autónoma y, al igual que el resto, está gestionada por la empresa Verificaciones Industriales de Andalucía (Veiasa), dependiente de la Consejería de Industria de la Junta.
A las puertas del recinto, en la calle Diderot, se concentran unos 220 trabajadores de este servicio (la mitad, para la Policía Nacional), lo que representa tres cuartos de la plantilla total en Málaga, según las organizaciones convocantes. El seguimiento del paro, tal y como han explicado el coordinador regional de UGT para las Veiasa, Romualdo Barcala, y Juan Gómez, vicesecretario General de CC OO para la misma sección, está en torno al 94%, por encima de la media regional, que se sitúa en el 90%. La medida de presión se ha traducido en una actividad bajo mínimos en las ITV; en la del Guadalhorce, los vehículos entraban con cuentagotas y, siempre, después de que el conductor pasara el «filtro» del piquete situado en el acceso y justificara que su caso estaba dentro de los supuestos recogidos en los servicios mínimos, esto es, preferencia para ambulancias u otros vehículos de carácter sanitario; de cualquier cuerpo de bomberos o adscritos a los cuerpos y fuerzas de seguridad, y autorizados para el transporte público de personas; vehículos que deban realizar una inspección técnica para comprobar la corrección de los defectos detectados en una anterior o aquellos que tengan la ITV caducada o haya caducado o caduque en los días de la huelga y que ya tuvieran cita concertada.
Es lo que le ha ocurrido a Jose Miguel Aguilar, de Alhaurín de la Torre, que, pacientemente, ha esperado a que le franquearan el paso, ya que corría el peligro de ser sancionado por no llevar la inspección en vigor, por estar ya pasada de fecha. «Llamé a la empresa y me dijeron que solo atendían emergencias y segundas revisiones, para la que yo tenía cita, y aquí estoy», explicó.
«Es la única forma que nos queda para reivindicar nuestros derechos, ha sido muy complicado tomar esta decisión», ha dicho Barcala, que deja claro que es necesario acabar con «desigualdades» como las diferencias de salario por un mismo trabajo que se dan actualmente. Por parte de CC OO, Juan Gómez, ha recordado que la falta de actualización del convenio, desde hace casi un lustro, contra la que protestan, afecta a cuestiones como los permisos retribuidos.
En las primeras horas de la huelga, que si no hay acuerdo se mantendrá hoy y los próximos 21, 23, 26, 27, 28 y 30 de septiembre, no se han registrado incidentes, salvo algún lanzamiento de petardos o encendido de bengalas, a las puertas de la ITV del Guadalhorce. Esta concentración ha tenido su reflejo en otros centros de la red de ITV en las ocho provincias andaluzas.
Los sindicatos, que piden perdón por las molestias a la ciudadanía, calculan que el paro afectará a unas cuatro mil citas al día, solo Málaga. Si se multiplican por las ocho jornadas de protestas, da como resultado más de 33.000 en la provincia; en Andalucía, serían unas 160.000.
Al respecto de la primera jornada de huelga, en un comunicado, la empresa pública Verificaciones Industriales de Andalucía S.A. (Veiasa), adscrita a la Consejería de Industria, Energía y Minas, ha informado del seguimiento de la protesta convocada por UGT y CC OO. Conforme a los datos de la propia Veiasa, Málaga, con un 71,05% de trabajadores en huelga, ha sido, junto a Cádiz, con un 73,86% registrado, la provincia con menor actividad en los centros inspectores a consecuencia de la acción de protesta. Para los cálculos, la empresa tiene en cuenta que la huelga la han secundado más de un setenta por ciento de los 266 empleados que forman parte de la plantilla efectiva en estos momentos (esto es, la que no se ausenta de forma justificada por cuestiones como vacaciones, bajas o asuntos propios), sobre un total de 335. Las estimaciones siguen la misma regla en el resto de provincias. En el caso de Almería, el seguimiento ha sido del 58,41%; en Córdoba, el 47,93%; en Granada, el 27,03%; en Huelva, el 59,21%; en Jaén; el 58,59%; y en Sevilla, el 49,04%.
El porcentaje andaluz, con una plantilla efectiva de 1.237 empleados, de un global de 1.647, ha sido del 56,35%, tal y como detalla Veiasa.
Igualmente, Veiasa informó de las «medidas que está adoptando para reducir al máximo las molestias a los usuarios que podrían verse afectados».
En primer lugar, explicó que se ha establecido comunicación directa con aquellos que tengan que acudir a los centros, «con el objetivo de evitar desplazamientos innecesarios». «Veiasa ha enviado un SMS de cancelación a los usuarios cuyas citas podrían verse afectadas por la huelga informándoles de la situación», se apunta en un comunicado. Igualmente, se ha procedido, explican desde la Administración regional, a la reubicación de citas. La empresa, aclaran, «contactará con los usuarios para reprogramar sus citas a la mayor brevedad con el objetivo de que todas las ITV canceladas queden reprogramadas lo antes posible».
Además, quedan fijados unos servicios mínimos, conforme a la decisión de la Dirección General de Trabajo, Seguridad y Salud Laboral de la Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, que son «equivalentes a aproximadamente un 15% de la plantilla total de inspectores y un 45% de la plantilla de personal administrativo». «Esto significa un inspector y un administrativo por turno en una línea de inspección universal (todos los vehículos a excepción de las motocicletas) en cada estación ITV», tal y como se precisa.
Del mismo modo, se organizan los servicios conforme a unas prioridades a la hora de pasar la inspección para que, en primer lugar, sean atendidos los «vehículos que presten servicios de ambulancia u otros de carácter sanitario; vehículos de cualquier cuerpo de bomberos; vehículos adscritos a los cuerpos y fuerzas de seguridad, y vehículos autorizados para el transporte público de personas». A continuación, «vehículos que deban realizar una inspección técnica para comprobar la corrección de los defectos detectados en una inspección anterior»; seguirán aquellos cuya ITV periódica haya caducado o caduque en los días de la huelga y que ya tuvieran cita concertada.
Igualmente, se deja claro que, si algún usuario con cita se desplaza a la estación y no puede realizar la inspección, podrá solicitar un certificado de cancelación, que tendrá validez para justificar la situación ante las autoridades en caso de que fuera necesario. Del mismo modo, las bonificaciones previstas no se verán afectadas por esta incidencia, ya que se mantendrá como referencia la fecha de la cita cancelada.
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