Íñigo Errejón cede el número dos de su candidatura en Málaga a Equo

Aunque la militancia de Equo tiene hasta este viernes para votar si quiere ir a las elecciones generales junto a Más País, el partido de Íñigo Errejón y los dirigentes de la formación ecologista ya han llegado a un acuerdo para que el número dos de la lista de Más País en Málaga sea ocupado por alguien de Equo. Así lo han confirmado fuentes implicadas en la negociación a este periódico. Los movimientos, aseguran, se están produciendo de forma vertiginosa. Por un lado, por la propia urgencia de los plazos. Por otro, porque existiría un trasvase de inscritos y simpatizantes de Podemos Málaga hacia Más País.

La configuración de la candidatura contará con alguien cercano a Errejón como número uno. Las mismas fuentes sitúan al exdiputado malagueño Alberto Montero como alguien con muchas posibilidades para encabezar este nuevo proyecto en Málaga. El propio Montero no se ha descartado en ningún momento, aunque ha aludido a que tendría que reflexionar sobre pros y contras si Errejón le pide, finalmente, que dé el paso. 

En cuanto al número dos, reservado para Equo, todo apunta a que se ha desatado un fuerte debate interno en el propio seno de la formación ecologista. Carmen Molina, hasta ahora cooportavoz de Equo en Málaga, ha presentado esta tarde su dimisión. "Tras ocho años de trabajo en Equo, también abandono un proyecto en el que puse mucha ilusión y esfuerzo", ha escrito en su cuenta de Twitter.

La irrupción de Más País ofrece un nuevo tablero político dentro del espectro de la izquierda en la provincia de Málaga. Además del PSOE y Unidas Podemos, habrá una tercera papeleta. En las últimas elecciones, entre PSOE y Unidas Podemos se sumaron seis diputados.

En este escenario de fragmentación, el segundo escaño que consiguió Unidas Podemos, que fue para Eva García Sempere, corre un serio peligro. Si se pierde, el beneficiado directo sería el PP, que podría subir de dos a tres diputados. Un escenario que no inquieta solo a Unidas Podemos. Entre los alcaldes del PSOE de Málaga también se mira al 10 de noviembre con ciertas reticencias.